Juventudes Socialistas pide "valentía" al Gobierno para avanzar en laicismo y revisar a la baja el acuerdo con Vaticano

MADRID 9 May. (EUROPA PRESS) -

Juventudes Socialistas de España (JSE) ha pedido al Gobierno "ambición y valentía" al poner en marcha la reforma de la Ley Orgánica de Libertad religiosa que anunció el pasado día 7 la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega y apuesta por "revisar a la baja" los acuerdos con el Vaticano.

La organización juvenil del PSOE considera que la reforma de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa ha de garantizar definitivamente la laicidad del Estado, tal y como lo recoge la Constitución, y cree "prioritario" realizar esta adaptación de la legislación vigente a la nueva realidad social de España, que ha experimentado muchos e importantes cambios que han dejado obsoleta la legislación vigente.

Según los jóvenes socialistas, en los últimos años ha habido un importante aumento de la pluralidad religiosa en nuestro país, así como un incremento del número de las personas que no se identifican con ninguna confesión concreta.

NO SE PUEDE DAR LA ESPALDA A LA REALIDAD".

"La legislación tiene que recoger estos cambios, y adaptarse a la nueva realidad social española, ya que en caso de no hacerlo se estaría dando la espalda a la realidad de nuestro país, creando una situación de discriminación absurda, que además viola los preceptos que recoge nuestra Constitución", señala JSE en un comunicado.

En este sentido, las Juventudes del PSOE piden al Gobierno que aproveche la reforma "para iniciar el debate sobre la necesidad de mantener y, todo caso, revisar a la baja los Acuerdos con el Vaticano, firmados en 1979, ya que sólo así se conseguirá garantizar un verdadero Estado aconfesional".

Los jóvenes socialistas han lamentado la reacción de algunos "sectores conservadores", que no han tardado en calificar el anuncio realizado por de la Vega como una medida contra la Iglesia Católica, cuando "sólo se trata de garantizar la laicidad del Estado, es decir su neutralidad en materia religiosa, y el libre ejercicio de la libertad de conciencia".

A su juicio, la reforma "no va en contra de nadie, sino en pro de la mejora de las condiciones de igualdad de todos los ciudadanos, y que va a tener todo el apoyo de Juventudes Socialistas, con el fin de que se lleve a cabo con todas las garantías, y consiga cumplir con su objetivo primordial".