Leguina cree que el Gobierno fue incoherente con los impuestos y lamenta que nadie se atreva a reformarlos "de verdad"

Actualizado: martes, 16 marzo 2010 14:16

MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente socialista de la Comunidad Madrid Joaquín Leguina cree que el Gobierno ha sido incoherente con su propuesta de subir los impuestos y, además, lamenta que ni socialistas ni 'populares' se atrevan a reformar "de verdad" un sistema fiscal que se apoya principalmente en los asalariados.

"Y así vamos, con un déficit de caballo y sin que nadie se atreva a meterle de verdad el diente --aparte de al fraude-- a una fiscalidad cuya columna vertebral es el IRPF, un impuesto que pagan casi exclusivamente (el 90% de la recaudación) los asalariados", escribe Leguina en un comentario publicado en su blog.

El ex dirigente madrileño afea al Gobierno central que, en este asunto, "la coherencia del logos gubernamental" ha "brillado por su ausencia" y empieza por recordar que "el líder máximo" --en referencia al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero-- afirmó que "bajar los impuestos es de izquierdas".

"Lo dijo antes de que cayeran chuzos de punta sobre la economía española", continúa, y esa tesis "fue matizada" en plena crisis por su 'número dos' en el partido, José Blanco, que en verano de 2009 anunció una subida de impuestos "pero sólo a los ricos", en palabras de Leguina.

Y ello para que al final lo que el Gobierno decidió subir fue el IVA. "Un impuesto indirecto que, como todo el mundo sabe, sólo pagan los ricos, ironiza el ex presidente madrileño. A su juicio, el problema es que, con los impuestos, "como en otros asuntos", "primero se dispara y luego se apunta".

EL DISCURSO DEL PP ES COHERENTE, PERO FALSO

En su comentario, Leguina arremete también contra el PP, a quienes ve "coherentes" pero en un "contumaz y machacón discurso según el cual bajar los impuestos conduce, inexorablemente, a la prosperidad".

Ese discurso, recalca, es falso --y para ello basta con mirar a Suecia, mucho más próspero y con impuestos más altos que Grecia--, por mucho que los 'populares' se empeñen en decirlo "al modo de Bartolo, que tocaba la flauta con un agujero solo".