Cree que no se llegó a su foto por casualidad, avisa que no le bastarán "excusas con la boca pequeña" y se reserva acciones legales
MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
El diputado de Izquierda Unida en el Congreso, Gaspar Llamazares, anunció hoy que ha enviado cartas a la Embajada de Estados Unidos en España, al Congreso norteamericano y al FBI exigiendo una investigación "a fondo" y una depuración de responsabilidades por la utilización de su imagen para confeccionar un retrato robot de Bin Laden, algo que, a su juicio, sólo puede ser achacable a un cierto "sectarismo político" por parte de la Administración estadounidense, pues entiende no es casualidad que hayan elegido precisamente su foto de entre todas las que circulan en Internet.
En rueda de prensa en la Cámara Baja, Llamazares mostró su "indignación más absoluta" por la "manipulación" de sus rasgos físicos que ha realizado el FBI en la composición de la imagen de los terroristas más buscados "de forma reiterada", entre ellos el líder de la red terrorista Al Qaeda, Osama Bin Laden.
El parlamentario de IU, que inicialmente pensó que la noticia se trataba de "una broma", considera que la utilización de su fotografía para componer el supuesto retrato robot del aspecto actual de Bin Laden, además de suponer "una degradación" de su imagen pública, por la que se reserva la opción de ejercer acciones legales, significa "la garantía de la impunidad del terrorista".
Llamazares también puso de relieve su "preocupación por la seguridad" tras este incidente: "Si son con estos mimbres con los que se garantiza la seguridad frente al terrorismo, ¿en qué manos estamos?", se preguntó.
LA GUERRA PREVENTIVA, UN FRACASO TOTAL
En este punto, el diputado achacó a "la incompetencia, el prejuicio y, lo que es que peor, al sectarismo ideológico" el uso que se ha hecho de su imagen por parte de los servicios de información y policiales estadounidenses "al calor de la guerra preventiva" que, según añadió, ha demostrado ser "un fracaso total" en la lucha contra el terrorismo.
Y es que Llamazares no piensa que se haya llegado a su imagen "por casualidad". "No creo que una búsqueda aleatoria de imágenes en Internet haya dado conmigo y mucho menos viniendo de los servicios de seguridad norteamericanos --aseveró--. No creo en las casualidades".
El representante de la coalición de izquierdas en el Congreso mostró también su preocupación "colectiva" por este hecho porque, a su juicio, "la cultura del miedo" desarrollada por el FBI supone "un atentado contra la seguridad y la libertad de los ciudadanos", en este caso la suya.
A este respecto, se preguntó si en vez de él, la víctima de esta "manipulación" policial hubiera sido un ciudadano anónimo. "Pues que probablemente, al poner el pie en cualquier aeropuerto, se habría encontrado con un susto o algo peor porque --enfatizó-- esta gente primero dispara y luego pregunta".
NO LE BASTAN EXCUSAS CON BOCA PEQUEÑA
Por todo ello, Llamazares exhortó a que se lleve a cabo una investigación "a fondo" para averiguar si los izquierdistas forman parte de los archivos del FBI y para conocer "quién ha sido el responsable" del "corte pega" de su imagen y si ha llegado a cobrar por el mismo.
Además, el diputado quiere que se "depuren responsabilidades" con respecto a este caso. "No me basta que el último de los técnicos del FBI caiga o sea desplazado, sino que quiero responsabilidades al mismo nivel que las acusaciones --enfatizó--. No me bastan excusas, quiero una investigación seria y una depuración clara de responsabilidades".
Del mismo modo, Llamazares pidió que se liberen a los órganos de seguridad y a las oficinas del FBI de la "contaminación" de "la guerra preventiva" y que ese, a su juicio, "nefasto" legado se abandone para que puedan hacer "su trabajo: perseguir a los delincuentes y preservar las libertades de los inocentes".
En aras de todos esos objetivos, el parlamentario de IU reveló haber enviado sendas cartas a la Embajada de Estados Unidos en España, al Congreso norteamericano y al FBI, a los que advierte de que su imagen pública no será reparada con excusas hechas "con la boca pequeña" ni con la retirada "parcial" de sus retratos".
EL EMBAJADOR AÚN NO LE HA LLAMADO
Llamazares dijo esperar también que el Gobierno "refuerce" en los próximos días los contactos con la Administración Obama para que pueda recibir una explicación "más allá" de lo que desde la Embajada en Madrid le han transmitido, esto es, que en breve conocerá las explicaciones de la investigación iniciada.
En este punto, lamentó que, hasta este mediodía, el embajador estadounidense, Alan Solomont, no se hubiera puesto en contacto con él para ofrecerle las explicaciones personales que prometió al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
El argumento, según explicó Llamazares, fue que ayer era festivo en Estados Unidos y que no se podía desarrollar "con rapidez" la investigación del caso. "Son muy rápidos poniendo esas imágenes en sus páginas web, pero muy lentos en la investigación y depuración de responsabilidades", denunció.
Por último, quiso agradecer el apoyo recibido por parte de todas aquellas personas que no han visto en esta cuestión "una motivo de chanza ni de burla" y asegurar que continuará su labor parlamentaria superando el cartel de "se busca".