La madre de un joven asesinado en 2010 en Tudela (Navarra) asegura que su hijo "no tenía ningún problema con nadie"

Palacio de Justicia de Pamplona.
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 17 enero 2012 13:15

PAMPLONA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

La madre de Javier Martínez Llort, el joven asesinado en Tudela (Navarra) en abril de 2010, ha afirmado en su declaración en el juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Navarra que su hijo "no tenía ningún problema con nadie" y que estaba "encantado" de vivir en Tudela. A preguntas de las acusaciones, ha asegurado que la víctima era un joven "sano" y estaba "muy contento con su trabajo".

Así lo ha manifestado este martes en la segunda sesión del juicio con jurado popular por el crimen de Tudela, en el que están acusados tres hombres: A.G., de 36 años, K.H., de 21 años, y M.K., de 25 años, todos de origen argelino. Los tres negaron en la primera jornada del juicio su participación en el crimen y aseguraron que estaban durmiendo en el momento en que sucedieron los hechos.

Según el escrito del Ministerio Público, los tres acusados rodearon a la víctima en un banco del Paseo Queiles de Tudela sobre las 5.30 horas del 11 de abril de 2010 y le exigieron al joven que les entregara lo que portara y al negarse, empezaron a golpearle. Arrancaron un listón de madera de uno de los bancos con el que le propinaron varios golpes en el cuerpo y "especialmente, en la cabeza y nuca".

La madre de la víctima ha asegurado que su hijo "no tenía ningún problema con nadie" y se "preocupaba" por su familia. "Venía todos los fines de semana a comer y se pasaba todos los días por mi casa. Se preocupaba por su hermana, que tiene una deficiencia, la visitaba y la sacaba por ahí", ha destacado.

Según ha relatado, el día de los hechos recibió una llamada de la Policía Municipal, que le comunicó que su hijo se había dado un golpe. Cuando llegó al hospital, ha añadido, el médico le dijo que Javier Martínez "estaba en coma".

En esta segunda jornada del juicio también ha declarado un amigo del fallecido, que ha destacado que tenía una "buenísima relación" con la víctima. Ha relatado que en la tarde del 10 de abril quedó con Javier Martínez y dos amigos más para ver un partido de baloncesto y otro de fútbol en su casa, en Ribaforada.

Cuando terminó el último partido, ha explicado, la novia de Javier Martínez, les llevó en coche de regreso a Tudela y les dejó en la puerta de un café del centro de la localidad, donde permanecieron hasta las 4 de la mañana. A esa hora se encaminaron a otro bar y perdió de vista a la víctima sobre las 5 de la mañana.

A preguntas de las acusaciones, el amigo ha señalado que durante la cena bebieron cervezas y vino, y durante la noche bebieron más alcohol. Según ha asegurado, esa noche no tuvieron "ningún problema con nadie". "Estábamos bebidos, contentos, pero como cualquier sábado. Javier era una persona atlética, pero bebimos y lógicamente te sientes más débil", ha afirmado.

"ESTABA MUY CONTENTO, COMO SIEMPRE"

Por su parte, la novia de Javier Martínez ha señalado que en la noche de los hechos dejó a la víctima y sus amigos en la puerta de un café de la localidad sobre la 1.30 horas, cuando se despidió de su novio. Según ha asegurado, en ese momento Javier Martínez "estaba muy contento, como era siempre". "Nunca tuvo ningún enfrentamiento con nadie, era una persona sana, hacía deporte, jugaba al padel, y estaba fuerte", ha destacado.

La novia, que ha afirmado que se iba a casar con él el 9 de julio de 2011, ha indicado que el Paseo Queiles es zona de paso hacia el domicilio que compartía con Martínez, por lo que ha insistido en que la víctima "sabía dónde iba perfectamente, a casa". A preguntas de las defensas, Madurga ha señalado que tras los hechos le devolvieron "la cartera, con 2 euros, y el DNI". En cuanto al móvil de la víctima, ha asegurado que no lo ha vuelto a ver.