Perpinya reconoce declaraciones "fuera de tono" y aboga por una "nueva etapa" de colaboración con todos, incluidos generales
MADRID, 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) pide, en una entrevista a Europa Press, que los responsables de Interior y Defensa que tendrán que firmar las sanciones a los guardias expedientados por la manifestación de uniforme consideren la aportación de la asociación a las leyes de reforma listas ya para entrar en vigor. "Nosotros representamos a trabajadores y trabajadoras de la Guardia Civil y somos la voz de mucha gente que acudió el día 20 de enero a Madrid a pedir cosas que el Parlamento ha aprobado ahora mayoritariamente", afirma Perpinya.
Según el líder de la asociación mayoritaria, no tendría "ningún sentido" que se sancione a guardias civiles que reclamaban algo que finalmente ha aprobado el Parlamento. "Hemos mantenido reuniones con miembros del Gobierno y del Grupo Parlamentario socialista para buscar acuerdos que permitieran que las leyes ahora aprobadas vieran la luz, es decir, nosotros hemos facilitado el apoyo extraparlamentario e, incluso a veces, el parlamentario. Sería una cosa difícil de entender que el Gobierno no tuviera en cuenta estas circunstancias a la hora de sancionar a los dirigentes de la organización", añade el secretario general de AUGC.
A fecha de hoy, los 21 expedientes abiertos se encuentran en su "fase final", según Perpinya. El director general de la Guardia Civil, Joan Mesquida, tiene ya encima de su mesa 16 expedientes redactados por el Cuerpo Jurídico Militar con propuestas de sanción que van desde la suspensión de empleo y sueldo de 3 a 12 meses para 18 de los dirigentes de AUGC y la expulsión del Cuerpo para los dos que tomaron la palabra, el propio Perpinya y el conductor del acto, José Luis Ramos.
DISCULPAS.
Además, Perpinya tiene otro expediente abierto por unas declaraciones en las que aseguraba que los generales habían cambiado el "todo por la patria por el todo por la pasta", algo que fuentes del instituto armado y del Ministerio del Interior reconocen que ha pesado profundamente en el ánimo de la cúpula militar de la Benemérita.
"Soy consciente de que ha habido gente molesta con mi discurso del 20 de enero y con declaraciones posteriores a los medios de comunicación, incluso con que vistiésemos nuestro uniforme para un acto como aquel --afirma Perpinya--. Me gustaría que se tuviese en cuenta la coyuntura en que fueron hechas mis declaraciones y, en todo caso, mi intención no fue la de ofender a nadie. Si lo hice, pido públicamente disculpas a todos los que pudieran sentirse agraviados. En otras circunstancias no habría hecho algunas manifestaciones que ahora considero fuera de tono", remacha el secretario general de AUGC.
AUGC señaló a los generales del Cuerpo como uno de los impedimentos para la aprobación de el Estatuto de Derechos y Deberes, sin embargo, Perpinya ve, ante su próxima entrada en vigor, "una nueva etapa". "Nosotros damos por superado el conflicto con la aprobación de las leyes. Queremos mirar al futuro para mejorar la Guardia Civil, que sea más moderna y eficaz, y queremos optimizar la calidad de vida y las condiciones de trabajo de los 79.000 hombres y mujeres guardias civiles. Y para eso sabemos que hay que contar con todo el mundo, también con los generales", asevera Perpinya, quien, al tiempo, se queja de que ningún representante del Instituto Armado acudiese a la tribuna del Congreso para celebrar la aprobación definitiva de los textos.
