MADRID, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
El pseudosindicato Manos Limpias que lidera Miguel Bernad, que será juzgado próximamente integrar una organización criminal de extorsión contra empresas, entidades bancarias y asociaciones a cambio de no hacerles publicidad negativa, ha pedido al juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz la "nulidad radical" del conocido caso Ausbanc porque, según señalan, ha impedido que sus abogados estén presentes durante toda la instrucción.
El abogado de Manos Limpias, Fermín Guerrero, han registrado este jueves un escrito dirigido al titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 para pedir que anule todas las actuaciones del caso abierto por las presuntas extorsiones que la Asociación Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc) realizó a empresas y entidades financieras.
Precisamente el magistrado dictó un auto este martes en el que enviaba a juicio a Bernad, al presidente de Ausbanc, Luis Pineda, la abogada Virginia López Negrete --que ejerció la acusación contra Iñaki Urdangarín y la Infanta Cristina en el juicio por Nóos-- y otras siete personas por estos hechos. También, sienta en el banquillo a la asociación y al denominado sindicato como personas jurídicas.
En este sentido, los letrados afirman que se ha vulnerado "de manera consciente y deliberada" el derecho de defensa y la tutela judicial de Manos Limpias, ya que éste "no ha tenido ni abogado, ni procurador que le defienda y le representa" durante todo el procedimiento.
Además, indica que el pasado mes de mayo el letrado Fermín Guerrero intentó personarse en la causa, algo que el juez instructor rechazó alegando que ya había otro abogado encargado de la defensa de Manos Limpias. Añade que esto es "falso" y que así se comprobó cuando en el último auto de Pedraz, el de apertura de juicio oral, pidió al pseudosindicato que designase abogado y procurador "por inexistencia de los mismos".
"Con esta actuación el juez Pedraz ha impedido al Sindicato Manos Limpias a lo largo de toda la instrucción poder ejercitar su derecho de defensa", concluye el escrito.
