Maragall dice a ERC que le conviene que se apruebe el Estatut catalán "en los mejores términos"

Actualizado: viernes, 3 febrero 2006 18:10


SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, aseguró hoy que "es bueno" para Cataluña que ERC tenga "una actitud positiva" ante las negociaciones del Estatut y advirtió a la propia Esquerra Republicana de que "también es bueno" para el partido que la reforma "se apruebe en los mejores términos posibles".

En respuesta a los medios de comunicación tras una reunión institucional con el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, en Santiago, Maragall eludió pronunciarse sobre la posibilidad de que su socio de Gobierno apoye la propuesta pactada con José Luis Rodríguez Zapatero si se garantiza la reincorporación de Josep Lluis Carod-Rovira al tripartito.

Preguntado por esta cuestión, el dirigente catalán se limitó a declarar que "sumar voluntades en bueno" y a zanjar que "se queda con esa fórmula". No obstante, aprovechó para reivindicar que la revisión del marco estatutario debe hacerse "de la forma más comprensible", no sólo para los catalanes, sino "para todos los pueblos y para el Congreso, que es el que los representa a todos".

Por otra parte, Maragall dijo sentirse respaldado por su partido y rechazó que las negociaciones sobre el Estatut hayan afectado a la confianza que la cúpula del PSOE tiene depositada en él. Así, aseguró que cuando se inició la reforma, "no se hizo sin analizar la cohesión interna y los lazos fraternales" con la dirección socialista.

Al respecto, declaró que "nunca como ahora en España se dieron las condiciones para asumir la pluralidad" del Estado que propugna Cataluña y se mostró convencido de que 25 años después de la promulgación del modelo autonómico, "hay condiciones de analizar lo ocurrido y de hacerlo con serenidad".

En este sentido, Maragall admitió la existencia de "dificultades, no sólo en el propio territorio sino en el conjunto de España", pero consideró que la "comprensión" del Gobierno ante la necesidad de reformar el sistema vigente supone una "circunstancia histórica por el bien de esta nación de naciones que es España".