BARCELONA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, aseguró hoy que su Gobierno comparecerá en el Parlament "cuando tenga que comparecer" por caso de la cartas enviadas por el secretario general de la 'conselleria primera' y responsable de finanzas de ERC, Xavier Vendrell, reclamando el cumplimiento de la carta financiera de ERC a cargos políticos.
En respuesta a la pregunta del líder del PP catalán, Josep Piqué, en la sesión de control del Parlament, Maragall recomendó a Piqué que "esté tranquilo, el Gobierno comparecerá cuanto tenga que comparecer aquí, en el Parlament".
Maragall reiteró su compromiso con la "máxima transparencia" y aseguró que "seremos extremadamente rigurosos" en este sentido. Por ello, aseguró que "no encontrará nunca un caso en el que no lo hayamos sido habiendo causa".
Además, añadió que el cuerpos de funcionarios de la Generalitat "sabe que de ellos se espera profesionalidad, eficiencia en su cometido y lealtad a la institución" y "saben que la ley les ampara si ven vulnerados sus derechos".
El presidente justificó el cese del jefe de la inspección de los funcionarios de la Generalitat, Joan Oller, en el marco de una reformulación de este área de la Conselleria de Gobernación, que dirige el republicano Joan Carretero, y explicó que Oller fue informado verbalmente del cese el pasado 6 de marzo, que se hizo efectivo el pasado día 31. Según Maragall, el cese se hizo por decisión del conseller Carretero y en "pleno ejercicio" de sus competencias.
Piqué también preguntó a Maragall por la dimisión del presidente del Consell Consultiu, Joaquin Tornos, a raíz de la polémica por los estudios encargados por el Gobierno tripartito a un despacho de abogados del cual es socio. Maragall consideró la dimisión de Tornos una "decisión en el marco de una institución de carácter autónomo e independiente" y que "merece todo el respeto".
Además, recordó que Tornos abandona el cargo para "no perjudicar" el Consultiu y que el Parlament ya está trabajando en una modificación legal para regular de forma detallada el régimen de incompatibilidades de los miembros de este organismo.
El líder del PP reprochó a Maragall la sucesión de "escándalos" y que "no pase nada" y citó desde el Carmel, la crisis del 3%, los "esperpénticos y nepóticos informes del Gobierno" y el caso de las cartas de ERC. Piqué preguntó si "Tornos es el único que tenía que dimitir y Oller el único que cesar", a lo que añadió "¿dónde están las manos limpias?".
Piqué lamentó que en la sociedad catalana se ha instalado un clima de "resignación incompatible con la identificación con las instituciones de autogobierno". Según Piqué, "cada vez más gente cree que no pasa nada" por los "escándalos", que "se impondrá la ley del silencio" y que "se taparán las vergüenzas".
Por ello, instó a Maragall a "tomar decisiones para que los ciudadanos recuperen la confianza en la gestión de los recursos" materiales, económicos y humanos de la Generalitat, "si es necesario por mayoría".
