Mas ve al electorado del PSOE "desconcertado" por el pacto con ERC en Cataluña

BARCELONA 21 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de CiU, Artur Mas, consideró hoy que "el tipo de pactos que han hecho en Catalunya desconciertan al electorado socialista" y puso en duda "hasta qué punto el partido socialista está escogiendo bien sus socios" cuando opta por un partido que "se declara independentista catalán".

En una entrevista a Antena 3 recogida por Europa Press, Mas formuló esta valoración al ser preguntado sobre la última encuesta del CIS, que recorta la distancia del PP respecto al PSOE.

Pese a reconocer que no se "cree" las encuestas --que en Catalunya "fallaron de manera estrepitosa"-, el líder de CiU sí dijo detectar cierto "desconcierto" en el electorado del PSOE por el pacto realizado en Catalunya, "porque no tenía razón de ser". "Sólo se trataba de dejar gobernar a un partido que había conseguido ganar unas elecciones desde la oposición, y en vez de eso, prefiere coaligarse con ERC, después del fracaso acumulado" con este partido en el anterior ejecutivo.

Mas reiteró que no se siente "traicionado" por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, "porque no habían compromisos firmes" en este sentido. "Pero otra cosa es que yo pueda juzgar hasta qué punto está escogiendo bien sus socios", porque escoja "a unos que se declaran independentistas catalanes no sé si es el mejor tipo de gobierno" que puede hacer, afirmó.

"BREVE CONVERSACIÓN TELEFÓNICA" CON ZAPATERO.

Al mismo tiempo, puso en duda el "talante positivo" de un partido que "no respeta al partido ganador de unas elecciones", señalando que, proporcionalmente, "el PSOE gano igual en España en 2004 que CiU en Catalunya" en estas elecciones. Mas reconoció haber hablado "muy brevemente por teléfono con Zapatero" en una "llamada de cortesía por parte suya", sin querer ahondar en la cuestión.

Aun así, Mas se volvió a comprometer a ejercer una oposición "firme" pero "constructiva" y aseguró que, en estos años, CiU mantendrá "la mano tendida y la capacidad de pacto" como ha hecho en los últimos años.

"Pero tampoco nos chupamos el dedo", advirtió, consciente de que "se está intentando cortar el paso a que CiU pueda gobernar en Catalunya a cualquier precio". Por ello, auguró una "oposición dura, sin contemplaciones, sin perder la serenidad pero sin pasarle ni una a este tripartito".

Mas puso en duda la capacidad de "sosiego" que el presidente Zapatero pide a los grupos del nuevo tripartito catalán, al considerar que se trata de "un gobierno sin ton ni son", cuyo "único objetivo" es "mantenerse en el poder".

El dirigente de CiU resaltó las deficiencias de un Gobierno que, en su opinión, "nace con tres proyectos políticos muy distintos", en el que "uno es independentista frente a otro que como mucho defiende la España plural", y que deberá "desarrollar un Estatut en el que no creen" porque uno de sus partidos, ERC, se opuso a él.

"DOBLE COMPONENTE" COMO "OPOSICIÓN" Y "LIDER MORAL".

Aun así, aseguró que CiU "actuará con respeto institucional", pero insistió en que la federación "tiene la fuerza moral de defender su proyecto y liderar buena en buena parte el país". Así, explicó que en esta legislatura CiU ejercerá su acción política desde un doble "componente": como "oposición en el Parlament", pero "fuera del Parlament tenemos derecho a intentar ser un gran referente de Catalunya".

En la línea de lo anunciado ayer en el acto de autoafirmación de CiU, Mas aseguró que a partir de ahora él mismo piensa "hablar fuera de Catalunya, también aquí en Madrid y en el resto del Estado, como lo que somos, la primera fuerza del Parlament de Catalunya".

"No pretendo ser un presidente de la Generalitat alternativo, como esta fanfarria que se ha organizado en México, nosotros actuamos de forma diferente, pero tenemos la legitimidad moral, aunque no la estrictamente de aritmética parlamentaria, de impulsar nuestro proyecto y liderar Catalunya porque somos los ganadores netos", afirmó.

Rehuyendo elucubraciones como la que ayer el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, hacía para augurar la posibilidad de una 'sociovergencia' tras una ruptura de la Entesa a medio mandato, Mas aseguró que su partido está "mentalizado" y "preparado para que esta legislatura dure cuatro años" e insistió en que "dure lo que dure, yo estaré al pie del cañón".