GUADALAJARA 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El obispo de Sigüenza-Guadalajara, monseñor José Sánchez González, consideró que las vacaciones son una "excelente oportunidad para dedicarnos más a la familia, a los amigos y a los enfermos" y para encontrar más tiempo para Dios y para los demás, especialmente para los hermanos "más necesitados".
En un carta pastoral con motivo de la llegada de las vacaciones, monseñor aseguró que el mes de agosto significa para muchos, aunque no para todos ni en la misma medida, vacaciones y por ello afirmó que como para toda actividad humana, también para las vacaciones es necesario prepararse.
En esta línea, el obispo de Sigüenza-Guadalajara recomendó preparar las vacaciones para que "no se nos vayan sólo en distracción y menos en relajación" ya que en su opinión "es un tiempo propicio para fortalecer nuestra salud corporal con el ejercicio, la adecuada alimentación, el sol, el aire, el agua y el contacto con la naturaleza", aseveró.
Asimismo, advirtió que la relación con Dios y la condición de estar siempre al servicio de los demás no conocen vacaciones. Al contrario, dijo, "dado que en el tiempo ordinario, durante el año, suele faltarnos tiempo para mantener el contacto con Dios y para dedicarnos más a los demás desde la gratuidad".
Además, se mostró sorprendido por el hecho de que en la celebración de la misa de los domingos haya generalmente una notable ausencia de niños. "Ellos pueden tener la impresión de que las vacaciones lo son para todo aquello que ha supuesto obligación o esfuerzo durante el curso, como estudiar, asistir a clase, participar en la Eucaristía del domingo, incluso algún día entre semana".
Por ello, aconsejó a los padres que hagan ver a sus hijos que la celebración del Día del Señor, la participación en la Eucaristía, la práctica de la oración y de la escucha de la palabra de Dios no tienen vacaciones.