BILBAO, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
El dirigente de Batasuna Arnaldo Otegi consideró hoy que el encuentro que mantendrán mañana representantes del PSE-EE y de la izquierda abertzale tiene "la trascendencia" de ser la primera reunión de estas características con carácter público, así como de constituir "una foto hacia el futuro" que "inclina la balanza política en términos de diálogo multilateral, entre diferentes".
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Otegi indicó que este encuentro tiene "la trascendencia a efectos políticos" de ser "la primera vez" que se hará con carácter público "en los últimos 25 ó 30 años". No obstante, criticó que "algunos la han querido dar trascendencia en exceso".
El dirigente abertzale destacó que se trata de "una foto hacia el futuro, y no del pasado" e "inclina la balanza política en términos de diálogo multilateral, entre diferentes", que, en su opinión también tendrá que ser "posible" con los socialistas navarros y del País Vasco francés.
"Ésa es la trascendencia política, es una foto de futuro que intenta poner bases sólidas y consolidar un nivel de relación y de construcción que permita construir el futuro de manera diferente", agregó el dirigente de Batasuna, que, preguntado si ve la posibilidad de un encuentro en La Moncloa, afirmó que "de momento no".
Otegi también se refirió a las peticiones que se han realizado a la Justicia desde distintos colectivos para intentar impedir este encuentro y aseguró, en este sentido, que es necesario "desconstruir la arquitectura jurídica y de represión" diseñada para "neutralizar e incluso destruir las estructuras políticas de la izquierda independentista", que, a su entender, "no tiene sentido" en el contexto actual "y mucho menos en el futuro inmediato".
Otegi subrayó que la ciudadanía "ha dejado de entender" aspectos como que, "en pleno periodo de construcción de un proceso de soluciones políticas al conflicto, que todos estemos pendientes de la resolución de un juez de instructor, situado en un tribunal de excepción como la Audiencia Nacional". En este sentido, señaló que "no cabe más posibilidad que empezar a desconstruir una arquitectura jurídica que no vale para la solución, sino que está hecha para la confrontación".
Asimismo, replicó al portavoz parlamentario del PSE-EE, José Antonio Pastor, que ayer indicó que "la marca Batasuna no existe" y señaló que la posibilidad que tiene la izquierda abertzale es "legalizarse, probablemente, con otra marca", que el debate sobre "marcas y siglas no tiene ni tan siquiera sentido" en el momento actual.
"Menos mal que la marca está desaparecida y Batasuna no tiene absolutamente ningún tipo de presencia política, porque, si llega a ser al contrario, no sabríamos en qué situación política nos encontraríamos", indicó.
LEGALIZACIÓN BATASUNA
En este sentido, insistió en que, en la actual situación, "el debate trascendental" no es de la legalización, sino "si conseguimos o no alcanzar un acuerdo político que permita abrir un diálogo multilateral" y reiteró que, por ello, "esa arquitectura jurídica que se construyó para aniquilar a la izquierda independentista en un periodo en el que se busca el diálogo con la izquierda independentista no tiene sentido".
En esta línea, advirtió de que, si no se respeta a la izquierda abertzale "su actividad política, difícilmente se va a construir un proceso".
Por otra parte, el dirigente de Batasuna afirmó que su reivindicación territorial sobre la mesa de diálogo no es "una exigencia" de la izquierda abertzale, sino que "es una posición de sentido común" ya que se necesita "un diálogo político multilateral sin exclusiones y en el que, por lo tanto, tienen derecho a participar todas las formaciones políticas, sociales y sindicales del conjunto de Euskal Herria que busquen un acuerdo y una solución".
"Quién le puede negar a quién en este país la posibilidad de participar en la construcción de un escenario democrático y de paz", se preguntó Otegi, que cuestionado por la posibilidad de poner en marcha distintas mesas en Euskadi, Navarra y el País Vasco francés, consideró que éste es "uno de los debates que habrá que hacer entre todos en un foro de carácter nacional", en el que "todos deberíamos estar convocados todos sin exclusiones". Según insistió, "la primera convocatoria debe estar abierta a todas las fuerzas políticas del país".
CALADO DECLARACIÓN ZAPATERO
En relación a la declaración de José Luis Rodríguez Zapatero para anunciar el inicio de conversaciones con ETA, reiteró que prefiere "quedarse" con el hecho de que, por primera vez en la historia, "un presidente del Gobierno de España ha dicho de manera solemne que se compromete a respetar lo que decidan los vascos libremente. Ese es el calado" de la declaración.
Asimismo, insistió en que debe responderse a la "matización" de Zapatero "en términos de que el ejercicio del derecho a decidir se haga respetando los métodos legales" que "esa legalidad deberá ser entendida no como límite a lo que pueda decidir la ciudadanía vasca, sino como una garantía de que lo pueda hacer". En este contexto, rechazó las críticas realizadas a la reacción de su partido a la declaración de Zapatero y aseguró que la izquierda abertzale "está en posiciones políticas donde ha estado siempre".
En relación a la presión que pueda ejercer el PP sobre el PSOE, advirtió de que "no se puede contentar a la vez a los que quieren destruir el proceso y a quienes lo queremos construir" y consideró que "haría mal quien piense que es compatible ir dando pasos para satisfacción de unos y de otros, porque al final ese camino no conduciría al éxito, sino a otro tipo de situación y escenario que nadie desea".
Por ello, agregó que, si los socialistas tienen "voluntad real y honradez política suficiente como para llevar hasta el final el camino emprendido, deberían de entender que, desde un punto de vista de Estado tendrá que hacer esfuerzos por incorporar al PP a esta dinámica, pero todos somos conscientes de que el PP tiene un solo objetivo, que es destruir el proceso iniciado".
Preguntado por la presencia del PNV en el actual escenario político, aseguró que la izquierda abertzale no está preparando "la pinza a nadie" y apostó porque "salga todo el mundo" y explique sus proyectos para que decida la ciudadanía.
Finalmente, se refirió a las declaraciones realizadas ayer por el sociólogo Javier Elzo en las que indicaba que ETA y MLNV deben pagar ahora el "precio político" de reconocer el "inmenso daño que han causado". En este sentido, Otegi consideró que, si bien esta reflexión es "legítima", en el actual momento, "no se corresponde a la situación política.
Asimismo, indicó que se trata de "una confesión de parte. Hay una tendencia generalizada a hablar de las víctimas de una parte y a hacer responsable de la violencia y del sufrimiento a una parte cuando el principal agente que ha planteado situaciones de violencia extrema contra nuestro país ha sido el Estado español". Preguntado por las referencias de Elzo a la renuncia de la violencia, replicó que a su partido le gustaría que "fuera hecha por parte del Estado" y
"Hay una violencia de origen, que está nítidamente en los Estados, ha habido una violencia de respuesta, que nadie duda que ha generado sufrimientos y, por tanto, es el Estado el que debe hacer una apuesta nítida por las vías políticas y democráticas. Es el Estado el que debe entender que debe respetar lo que decidan los ciudadanos vascos de manera libre, pacífica y democrática y nosotros estamos deseando llegar a ese escenario", concluyó.
