MADRID, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, insistió hoy en que el Gobierno apoya a los gobiernos locales y defendió las partidas destinadas a ellos en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2009. Sin embargo, el PP le acusó de haber elaborado el presupuesto "más antimunicipalista y antisocial de la democracia".
Durante el debate en el Pleno del Congreso sobre las cuentas públicas para 2009, Salgado defendió la acción del Ejecutivo en favor de las haciendas locales y recordó la enmienda pactada con IU-ICV-ERC para ampliar en 20 millones de euros el fondo destinado a los municipios de menos de 20.000 habitantes, que se eleva así hasta los 60 millones.
Además, señaló que el Ministerio mantiene la partida de subvención a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), lo que, según subrayó, "consolida" la decisión del Gobierno de apoyar el papel institucional de la FEMP de relación con los gobiernos locales y el Estado. "Una relación particularmente intensa y fructífera", enfatizó.
Sin embargo, el PP reiteró su rechazo a las cuentas y acusó a la ministra de defender el Presupuesto "más antimunicipalista y antisocial de la democracia". "Por primera vez decrece el dinero destinado a las corporaciones locales, y son las que más política social llevan a cabo", advirtió el portavoz del PP de Administraciones Públicas en el Congreso, Rafael Merino.
El diputado 'popular' acusó al Gobierno de ser el responsable de la situación "extrema" en la que se encuentran las entidades locales y explicó que, como consecuencia de que el Ejecutivo negase la crisis en 2007, los ayuntamientos elaboraron unos presupuestos "que ahora son inviables". "Y eso va a provocar un aumento del paro --alertó--. Todo gracias a su política antimunicipalista".
ARMAMENTO SOCIAL DE LOS AYUNTAMIENTOS
La necesidad de mejora de la financiación local también tuvo lugar en el discurso del diputado de ERC Francesc Canet, quien reclamó que se tomen algunas "medidas transitorias" hasta el acuerdo del nuevo modelo. Asimismo, el diputado de CiU Pere Macias advirtió de que la crisis económica provocará una difícil situación para los ayuntamientos el próximo año. "Si los ayuntamientos no están en disposición de sacar a la calle todo su armamento social se hará un flaco favor a los ciudadanos", insistió.
Sin embargo, la portavoz socialista de Administraciones Públicas, Meritxell Batet, defendió que las partidas contempladas en los presupuestos "no tienen nada que ver" con la reforma del modelo de financiación local. "En ello está trabajando el PSOE, pero en el ámbito adecuado y no con enmiendas demagógicas", apuntó.
En el debate sobre las cuentas del Ministerio de Administraciones Públicas también salió a la luz la reforma del modelo de financiación autonómica. El representante de CiU recordó que ésta ha sido una de las principales causas para su rechazo a los PGE y señaló que se trataba de uno de los compromisos "básicos" del Ejecutivo.
De la misma forma, el portavoz 'popular' se preguntó por qué el Ejecutivo acomete la reforma de los estatutos de autonomía "si después no es capaz de cumplirlos" y lamentó que no ofrezca "ninguna respuesta" en los Presupuestos. "Por qué engañan ustedes", preguntó.
MEJORA DE LOS SERVICIOS
Salgado defendió sin embargo las cuentas de su Departamento y explicó que están orientados a la generalización de los servicios públicos telemáticos, la modernización de la administración, el apoyo económico a los gobiernos locales y la mejora de los servicios que se ofrecen a los ciudadanos.
En este sentido, subrayó el montante dedicado a las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno y enfatizó que los gastos de personal se incrementan un 27 por ciento para hacer frente a los puestos creados los pasados años para determinadas campañas.
