Piden siete años y medio de internamiento para un hombre que mató a su madre en 2006 obedeciendo a "voces del diablo"

Actualizado: lunes, 24 noviembre 2008 14:33

Las hermanas advierten de que cuando salga "los va a matar a todos" y aseguran que hace 20 días envió a casa una carta "con amenazas"

OVIEDO, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

El enfermo mental Juan R. R., acusado de asestar varias puñaladas a su madre tras escuchar unas voces en su cabeza que le decían que debía matarla, el 16 de diciembre de 2006, en el domicilio familiar de Las Mazas (Riosa), pidió hoy perdón a su familia en la declaración que realizó ante el juez. La fiscal reclamó para el acusado siete años y medio de internamiento en un centro psiquiátrico penitenciario.

El juicio, que se celebró hoy en el la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Oviedo, quedó visto para sentencia después de declarasen ante el magistrado el acusado dos peritos (psicóloga y médico forense). Las partes acordaron rechazar la declaración de los testigos y de los agentes de la policía después de que el acusado reconociese los hechos.

La fiscal modificó su escrito de calificación y solicitó para el acusado la pena de siete años y seis meses de internamiento en un centro psiquiátrico penitenciario al entender que el hombre sufre una conducta "epileptoide". En su escrito inicial pedía la pena de diez años.

El acusado declaró ante el juez que escuchó "voces del diablo" en su cabeza que le obligaban a matar "a quien se le pusiera delante". "Yo no quería hacerlo pero no tenía otra opción", señaló. El imputado afirmó además que "no sabía que estaba apuñalando a su madre".

"Ese día por la mañana estuve tomando unos vinos con casera y por la tarde dos o tres cervezas. Cuando llegué a casa mi madre me riñó por llegar tarde. Entonces encendí la radio, cogí un cuchillo de la cocina y la apuñalé siguiendo la indicaciones del diablo que me incitaba a apuñalar a alguien", confesó el acusado.

El procesado señaló que estas voces ya las había escuchado dos días antes de los hechos y negó conocer que debido a la medicación tenía prohibida la ingesta de alcohol. "No sabía que no podía beber", apuntó.

Por su parte, los médicos forenses manifestaron que el acusado "sabía lo que hacía cuando apuñaló a su madre" y descartaron que el imputado sufra esquizofrenia. Los médicos señalaron que el acusado tiene una conducta epileptoide "con tendencia a no poder controlar la agresividad ni los impulsos".

Los peritos aseguraron que su conducta es compatible con la posibilidad de tener alucinaciones. "Las personas con estas patologías si escuchan una voz delirante lo habitual es que lo cumplan", añadieron.

AMENAZAS A LOS FAMILIARES

En otro sentido, dos hermanas del acusado manifestaron en los pasillos al finalizar la vista oral su temor a que vaya a por ellas cuando salga del centro. "Mi hermano nos envió una carta a casa hace 20 días amenazándonos". "No queremos nada malo para él pero tienen que buscar una solución".

Una de las hermanas señaló que en la misiva el acusado explicó que "no pretendía matar a su madre sino que lo que quería era acabar con la vida de su sobrina de nueve años y de su hermano, el padre de la pequeña".

"Nos va a matar a todos", advirtió una de las hermanas del acusado que añadió que su hermano ya había dado una paliza a una señora "que la dejó KO" y también recordó que estuvo cinco años en prisión en Badajoz por apuñalar a su otro hermano.

Tras esos hechos, el morciniego fue atendido en en el Sanatorio Marítimo de Gijón y en su expediente del Servicio de Salud del Principado (Sespa) figura una dolencia psiquiátrica de la que llevaba tiempo "sin tratarse a fondo".

La madre del acusado, que se encontraba hoy en los pasillos del juzgado, recibió varias puñaladas en el estomago con resultado de perforación del colon y en el tórax. Además sufrió heridas en en el brazo derecho y en las manos al intentar protegerse de la agresión. La victima estuvo 23 días hospitalizada y las heridas tardaron en curar 122 días.