BILBAO, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha considerado que el papel de los "observadores" internacionales en Euskadi, cuya presencia "siempre es buena", debe ser "justamente el que han de tener" y "tampoco más" que el de "los que realmente somos los protagonistas", los partidos políticos vascos. En este sentido, ha indicado que las "referencias" de otros procesos en el campo internacional "no son modelos".
En una entrevista concedida a Radio Popular, recogida por Europa Press, el dirigente nacionalista se ha pronunciado de este modo preguntado por la puesta en marcha del Grupo Internacional de Contacto, que este martes ha presentado en Bilbao sus propuestas, y que Urkullu ha calificado como "un esfuerzo más por intentar dar pasos en los procesos tanto de pacificación y como de legalización, normalización en la convivencia política".
A su entender, "siempre es bueno que haya observadores que tengan el papel que justamente han de tener, tampoco más que el que debamos tener los que realmente somos los protagonistas: los políticos de la sociedad vasca y a los que la sociedad vasca debe pedir cuentas".
El presidente del PNV ha reiterado su apuesta por que "los procesos, incluso en los llamados de pacificación donde haya una necesidad de verificación, tengan también una habilitación parlamentaria", así como por que "la normalización en la convivencia política venga dada por la relación normalizada entre las formaciones políticas" y que "todas las sensibilidades puedan tener opción para que sean votadas".
"A partir de ahí, podemos tener muchas referencias a nivel internacional, pero somos nosotros los que tenemos que ser los protagonistas", ha insistido Urkullu, para quien "no podemos asemejar" el caso vasco a otros procesos internacionales pero "siempre hay referencias que merece la pena contemplar" como en materia de tratamiento víctimas o los programas de fondos europeos. De cualquier modo, ha precisado son "referencias", pero no "modelos".
Por otro lado, ha esperado que, "aunque sea en el último minuto", el nuevo partido de la izquierda abertzale, Sortu, "pueda ser legal y pueda estar presente en las elecciones" para que sean los ciudadanos los que "nos pongan a cada uno en nuestro sitio".
En este sentido, ha cuestionado cuál es "el problema para que sean legales", si la izquierda abertzale "cumple" con la legislación vigente "y además habiéndose disociado de esa legitimación que hasta ahora se venía dando a una organización terrorista en la práctica de la violencia con supuestos fines políticos".
Por ello, ha apostado por que "a todos nos entre, más allá de lo que pueden ser los cálculos electoralistas, el sentido común" e "impere la razón". En su opinión, el Gobierno central "debería ser proactivo" y tanto el PSOE y como el PP deberían "dejar este lenguaje ambiguo" que han mantenido desde la presentación de Sortu, "diciendo que ha habido un paso importante pero que sean los tribunales los que decidan porque fueron los tribunales los que ilegalizaron a Batasuna".
"Creo que el PSOE y el PP no deberían refugiarse en que sean los tribunales quienes decidan, en un ejercicio de lavarse las manos", ha asegurado.
En relación a la postura del lehendakari, Patxi López, ha insistido en que "todos podemos ser un poco más proactivos, y más quienes tenemos una responsabilidad institucional, como es el caso del lehendakari".
NO HA HABIDO CONTACTOS
El presidente del EBB ha asegurado que no ha tenido contactos con los promotores de Sortu, pero sí con "el entorno" de la izquierda abertzale "desde hace bastante tiempo", y se ha mostrado convencido de que "quien más perjudicado saldría de que esto fuese un movimiento táctico y con un planteamiento de engañar a los demás sería la propia izquierda abertzale, si quiere ser un referente en el mundo de la política vasca".
Por otro lado, ha indicado que "es falaz" la "acusación" al PNV de que pueda verse favorecido por la legalización de Sortu. Tras recordar que su formación se opuso a la ley de Partidos y destacar que ésta se ha aplicado de forma "arbitraria", ha insistido en que "la fotografía" de la Cámara vasca en la actualidad "es incompleta", aunque ha precisado que "el hecho de que estén presentes no significa que el PNV vaya a pactar con esa formación política" y ha insistido en que "el futuro" en materia de pactos "está por escribir".
"Lo que interesa es que toda la sociedad vasca se vea representada en la fotografía institucional y, hoy por hoy, en el Parlamento vasco no hay una fotografía completa", ha insistido el presidente del PNV, que ha reiterado que, con el hecho de que apueste por que la izquierda abertzale sea "legal" y "esté presente en las instituciones" y por convocar elecciones para tener "una fotografía completa" en todas las instituciones, no "quiere decir" que considere que el Gobierno vasco actual sea "ilegítimo".
De este modo, ha señalado que "sería bueno para la normalización, la convivencia política, que todas las formaciones políticas tuviéramos la representación que los ciudadanos nos asignan y que, tras esa fotografía completa en las instituciones, empiece una relación normalizada" entre los partidos.
En este sentido, ha planteado que, si el consejero de Interior, Rodolfo Ares, "tiene algún problema" por la posibilidad de que el Parlamento vasco se tuviera que disolver, "quizá lo que le preocupa es que es consciente de que los números de mayoría absoluta entre PSE y PP no le dan".
Asimismo, ha asegurado que atribuye al Gobierno vasco el mismo mérito que "a cualquiera de los agentes políticos que hemos tenido una posición de firmeza ante lo que es el rechazo, la condena, a una organización terrorista y cualquiera de los agentes políticos que hemos participado en ir dando pasitos para intentar generar una conciencia ética en la sociedad vasca y tener una postura franca, firme, ante la izquierda abertzale".
LA FUERZA DE LA DESLEGITIMACIÓN
En relación a ETA, el presidente del PNV ha considerado que "es mucho decir" que pueda estar acabada y ha apostado por "seguir con mucha cautela", aunque "hay que valorar la menor capacidad operativa que puedan tener". En este sentido, ha señalado que "es difícil pensar que cierren, de la noche a la mañana, la persiana", teniendo en cuenta además que no han conseguido "ninguno de los objetivos que propugnaban".
Asimismo, ha resaltado que, en este campo, además de la acción policial y judicial, "hay una fuerza terrible, que es la deslegitimación de la violencia por parte de la sociedad vasca en su conjunto en su conjunto y, en este momento, espero que a esto ayude también la deslegitimación por parte de la izquierda abertzale".
Preguntado por la posibilidad de que la banda terrorista sufra una 'grapización", ha reconocido que "sobre eso hay mucha precaución y preocupación", si bien ha agregado que "la grapización, al final, es identificar como algo marginal, que no tiene los caracteres de la organización terrorista ETA y el apoyo que, en algún espectro de la sociedad, ha tenido durante estos últimos 50 años".
Tras recordar que, a lo largo de la historia de la organización, ya ha habido "escisiones en su mundo", ha señalado que, si hay "gente que pueda tener la tentación en el futuro de seguir empuñando unas armas y dotar a esa acción un ropaje de objetivos políticos, eso es lo que tenemos que rechazar todos y, en particular, en estos momentos, la autodenominada izquierda abertzale".