Los presos en huelga de hambre juzgados por el 11-M se efrentan a penas de casi 39.000 años de cárcel

Actualizado: lunes, 3 septiembre 2007 20:31


MADRID, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los dos acusados por su relación con los atentados del 11-M que han comenzado una huelga de hambre junto a otros 9 presos islamistas que se encuentran encarcelados en prisiones de la Comunidad valenciana, Hassam El Haski y Otman El Gnaoui, pertenecen a los considerados autores intelectuales o materiales de la masacre y se enfrentan a solicitudes de condena de casi 39.000 años.

Hassan El Haski (en la imagen) está considerado como uno de los inspiradores de los atentados de los trenes de cercanías en Madrid el 11 de marzo de 2004. Presunto dirigente de Europa del Grupo Islámico Combatiente Marroquí (GICM), rama marroquí de Al Qaeda, fue detenido en Lanzarote meses después de la masacre.

La Fiscalía de la Audiencia Nacional le considera culpable de los delitos de pertenencia a banda armada, 191 asesinatos terroristas, 1.841 en grado de tentativa y cuatro delitos de estragos por los que solicita un total de 38.952 años de prisión.

Por su parte, Otman El Gnaoui pasó recientemente a ser considerado uno de los autores materiales de los atentados. El Ministerio Público, que únicamente le imputaba pertenencia a organización terrorista, suministro de sustancias explosivas y falsificación en documento oficial, delitos por los que solicitaba una condena de 24 años, elevó la pena pedida en su calificación definitiva a un total de 38.962, al considerarle después del juicio cooperador necesario para la comisión de los atentados.

La relación de los participantes en la huelga con el juicio del 11-M se extiende a Abdelkrim Bensmail que declaró como testigo en el proceso debido a que durante su encarcelamiento se le localizó una nota con la dirección postal del etarra Henri Parot en prisión. Disponía además de un documento en el que se explicaba la fórmula de fabricación de la cloratita.

Los dos procesados secundaron durante el pasado mes de mayo, en pleno desarrollo de la vista oral, otra iniciativa de este tipo que se prolongó durante menos de una semana. En aquella ocasión la intención fue también llamar la atención sobre lo que consideraban una acusación injusta.

Bensmail, procesado en relación con la conocida como 'Operación Nova' que desembocó en la desarticulación de un grupo radical en octubre de 2004, se enfrenta a una petición de cárcel de 11 años de prisión por pertenencia a organización terrorista.

ATENTADO EN LA AUDIENCIA

También comenzaron el pasado sábado una huelga de hambre en la prisión de Fontcalent (Alicante) y en Villena (Valencia) otros tres presuntos terroristas islamistas detenidos también durante la primera fase de la operación Nova, pendientes de juicio, a quienes la Fiscalía de la Audiencia Nacional acusa de planear atentados contra diversos objetivos en España, entre ellos la Audiencia Nacional, que pensaban hacer volar estrellando contra ella un camión-bomba.

Se trata de Dgilali Mazari, Mohamed Amine y Ahmet Chebli, los dos primeros cumpliendo prisión preventiva en Fontcalent y el tercero en Villena.

Para el primero, el fiscal Rubira solicita en su escrito de acusación provisional, presentado el pasado 18 de junio, un total de 13 años de cárcel por un delito de pertenencia a banda armada en grado de director, al considerarle lugarteniente en la zona valenciana de Gandia del líder de esta célula terrorista en España, Abderahmane Tahiri, Alias "Mohamed Acraf".

Para Amine y Chebli, el fiscal pide 11 años de cárcel por un delito de pertenencia a organización terrorista en grado de integración en la red terrorista denominada "Mártires por Marruecos", encuadrados en el Grupo Salafí para la Predicación y el Combate, cuyo objetivo es, según la Fiscalía "conquistar el poder mediante la 'Guerra Santa' a fin de establecer la Sharia o Ley Islámica y la aceptación del martirio.

"OPERACIÓN TIGRIS"

Otro de los presos islamistas que ha decidido abstenerse de ingerir alimentos es Riduane El Ouarma, procesado por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón a principios del pasado mes de junio por un delito de integración en organización terrorista detenido junto a otros 32 presuntos terroristas en la denominada "Operación Tigris", desarrollada por la Policía en junio de 2005.

Garzón acusa a El Ouarma de formar parte de un aparato de captación y adoctrinamiento de personas para convertirse en "mujahidines" en Irak. La red "Tigris" se articulaba en cuatro grupos perfectamente definidos en Madrid, Barcelona, Valencia y Ceuta, perteneciendo este presunto terrorista a la célula catalana.

CONDENADO POR LA AUDIENCIA

El único de los islamistas que ha secundado la protesta sobre el que pesa una condena firme es Souhil Kaouka. La Audiencia Nacional le condenó en una sentencia hecha pública el pasado mes de febrero a 13 años de prisión por pertenencia a la célula terrorista conocida popularmente como 'Comando Dixan'.

Por último, entre los presos en huelga de hambre se encuentra Hassam Mourdoude involucrado en un delito de financiación de este tipo de redes terroristas.