MADRID 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los promotores de la demanda contra la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal --por acusar al Gobierno de espiar ilegalmente a miembros de su partido-- han renunciado a seguir adelante por la vía judicial contra la dirigente 'popular' y, además, han cerrado el grupo que crearon en la red social Facebook para recabar apoyos a esta causa.
El grupo llegó a presentar una demanda de conciliación para la que fue citada De Cospedal, el pasado 17 de febrero, pero ésta no acudió y, a través de su procurador, dejó claro que no reconocía legitimidad a los demandantes y que ni se retractaba ni se ratificaba en sus palabras.
Según informó hoy el creador del grupo, Carlos Rodríguez Ibáñez, este colectivo es consciente de que sería muy difícil que el Tribunal Supremo aceptara una demanda contra De Cospedal --que es aforada en su condición de senadora y por tanto sólo puede ser juzgada por este tribunal-- teniendo en cuenta además que los demandantes no están directamente afectados en el caso.
El grupo también ha descartado otra opción que le plantearon sus asesores jurídicos: presentar una demanda ante un juez de instrucción y que éste llamase a declarar a De Cospedal para que ella precise quién realiza las escuchas que ella denuncia, puesto que si fuesen ciertas serían un delito.
EL COSTE SERÍA INASUMIBLE
Según Rodríguez Ibáñez --concejal socialista en el municipio murciano de Cehegín--, en su decisión de abandonar el caso ha pesado el "desgaste personal" que ha sufrido, "insultos y amenazas" anónimos en su cuenta de correo electrónico incluido, y también el coste económico que tendría seguir adelante, "prohibitivo" para el bolsillo de los demandantes.
Por ello, señaló que ha decidido cerrar también el grupo de Facebook desde el cual se organizó toda la demanda ("De Cospedal debería ser demandada por injurias", que recibió casi 8.000 adhesiones) pero aseguró que el colectivo volverá "a saltar como un resorte" ante todo aquello que considere un ataque al Estado de Derecho.
"Deseamos que al menos nuestras acciones sirvan a todos los políticos a pensarse dos veces las cosas antes de decirlas alegremente, aunque éstas se realicen bajo el sol de agosto y junto al hoyo de un campo de golf", concluyó.