BARCELONA, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El portavoz adjunto del PSC en el Parlament, Joan Ferran, aseguró hoy que la situación de las infraestructuras que sufre Cataluña es fruto de ocho años del "desierto inversor" que se produjo durante los gobiernos del PP en España con la ayuda y el "silencio cómplice" de CiU.
A través de un comunicado, Ferran lamentó los episodios relacionados con las infraestructuras que los catalanes sufrieron este fin de semana pero, al mismo tiempo, acusó a CiU de tener una memoria "muy corta", ya que "cada nuevo incidente que se produce hoy apunta directamente a los anteriores gestores públicos, CiU y PP", aseveró.
Ferran pidió a los nacionalistas que hagan "aportaciones en positivo" en lugar de críticas porque "si no hubiese sido por las medidas de choque de los gobiernos actuales, la situación aún sería mucho más grave", opinó.
El socialista consideró que la "auténtica pasividad" de la que se queja CiU es la que exhibió la federación entre 1996 y 2004, "cuando daba apoyo a unos presupuestos que castigaban por sistema a Catalunya", mientras que ahora el Govern "trabaja y recupera el tiempo perdido proyectando y presupuestando unas infraestructuras que también eran necesarias hace ocho años".
El portavoz parlamentario se mostró seguro de que las obras del tercer carril de la AP-7 en Tarragona y el desdoblamiento de la N-340 a su paso por la misma zona estarán listas el verano que viene, lo que aligerará la situación y podría evitar colapsos como el del sábado.
