Ve positivo la "bipolarización" de la campaña y creen que el discurso 'duro' de Rajoy puede movilizar a los progresistas
LA CORUÑA, 29 Feb. (de la enviada especial de EUROPA PRESS Carolina Jiménez) -
El comité electoral del PSOE está satisfecho con el desarrollo de la campaña electoral, pero cree que aún no ha logrado una movilización suficiente de votantes para alcanzar en las urnas una mayoría que le permita gobernar "sin hipotecas", según señalaron fuentes de este comité.
Por eso, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se concentrará en la segunda parte de la campaña en pedir activamente el voto y en insistir a los potenciales votantes progresistas en que no se queden en casa después de haber pasado la primera parte centrado en un discurso de "no es lo mismo", de marcar diferencias y presentar al PP como una vuelta al pasado y al PSOE como un partido de progreso.
Ese discurso, no obstante, estará condicionado también al desarrollo del segundo debate entre Zapatero y el candidato 'popular', Mariano Rajoy, señalaron las fuentes.
Eso sí, el PSOE parte de la base de que va a ganar las elecciones y asegura que sus encuestas le dan una tendencia ascendente en intención de voto desde unas dos semanas antes de la campaña, incluso con una "inflexión" después del debate entre Zapatero y Rajoy.
El comité electoral se reunió esta mañana y, según su análisis, la campaña electoral está cumpliendo sus objetivos: lograr una amplia movilización, confirmar que una amplia mayoría de españoles quiere que el PSOE gane las elecciones y lograr que la campaña se bipolarice y que los ciudadanos perciban que sólo hay dos opciones: o gobierna Zapatero, o gobierna Rajoy.
Según las fuentes, el PSOE aprecia indicios de movilización que podrían sugerir que la participación será muy alta, como la masiva afluencia a los mítines -en el PSOE aseguran que no se vio una movilización igual desde los primeros tiempos del primer gobierno socialista- y, al margen de las posiciones políticas, la altísima audiencia de los debates electorales y las entrevistas, que apuntan a que los ciudadanos están muy pendientes de la campaña.
Además, añadieron que los primeros datos sobre el voto por correo, que se ha incrementado desde 2004, apuntan también a una participación muy alta.
Por otro lado, los socialistas valoran que, según las encuestas, una mayoría de los ciudadanos quiere que Zapatero sea presidente del Gobierno, pero creen que aún no han movilizado suficientemente el voto y en la segunda semana de la campaña se concentrarán en decir a los votantes que no es suficiente con desear una victoria socialista, sino que hay que ir a votar.
Y en tercer lugar, el PSOE ve positivo para sus aspiraciones la polarización de la campaña electoral entre el PSOE y el PP, y de hecho Zapatero la destaca en sus intervenciones públicas, en las que llama a elegir entre un gobierno de progreso y otro de retroceso.
EL DISCURSO DEL PP AYUDA AL PSOE
En este sentido, los socialistas se consideran incluso beneficiados por el discurso del PP que, a su juicio, no hace más que consolidar el voto de quienes ya estaban convencidos de votar al PP.
A pesar de que Rajoy hizo un intento de atraer a votantes progresistas, de acercarse a los trabajadores e incluso de decir al votante socialista que en su proyecto caben todos, el PSOE cree que el líder 'popular' ha vuelto a su discurso de toda la legislatura, centrado en la confrontación sobre el terrorismo y la inmigración.
Además, no ha aclarado cuáles son sus propuestas en política económica y si aplicarían "recortes" y "decretazos", como dice el PSOE, si llegaran al poder, Todo ello, estiman los socialistas, puede movilizar al potencial votante progresista.
En este punto, el PSOE destaca que el PP incluso ha "recuperado" al ex presidente José María Aznar, que ha entrado en la campaña y no cree que ello sirva para acercarse al electorado centrista, y considera "muy peligroso" el discurso de Rajoy en particular sobre inmigración, porque cree que alienta el miedo y la xenofobia.
