Puigcercós defiende a Benach pero dice que ERC avanzará en el código de buenas prácticas de sus cargos institucionales

BARCELONA, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente de ERC, Joan Puigcercós, defendió hoy al presidente del Parlamento catalán, Ernest Benach, por el asunto de los accesorios en su coche oficial, pero anunció que ERC avanzará en la elaboración de un código interno de buenas prácticas de sus cargos institucionales.

En declaraciones a los periodistas tras reunirse con dirigentes de Unió de Pagesos, lamentó que "la debilidad de las instituciones catalanas ha quedado de manifiesto con los hechos vertidos sobre el presidente del Parlamento", quien ayer anunció que ordenó hacer retirar los accesorios polémicos que mandó instalar en su coche oficial por valor de 9.200 euros.

Puigcercós --que en junio fue rival de un Benach avalado por el ex presidente Josep Lluís Carod-Rovira en las primarias para escoger al nuevo presidente de ERC-- alertó de que "cuando se dispara contra el presidente del Parlamento catalán, segunda autoridad del país, automáticamente todo entra en cuestión, desde la Presidencia de la Generalitat a una Conselleria o el mismo presidente del Parlamento".

Pese a asegurar que "la honestidad y transparencia no es precisamente lo que ha faltado en este caso" porque "se ha explicado y se ha dicho lo que había", avanzó que el manual de buenas prácticas de cargos institucionales de ERC --un mandato del congreso del partido y uno de los compromisos de Puigcercós con la militancia-- previsto para 2010, se empezará a elaborar ya por la polémica en torno al coche de Benach.

El presidente de ERC alerto de que "más que nunca, las instituciones catalanas deben hacer un esfuerzo en momentos de crisis de transparencia, honestidad y austeridad", por lo que defendió el código de buenas prácticas que impulsará el partido para "explicar a los ciudadanos que si alguien hace un esfuerzo por la transparencia es ERC", como se demostró, dijo, aprobando la Ley de la Oficina Antifraude que ERC impulsó. Ante esta "campaña", ERC "sólo responderá con transparencia", apostilló.

"En ningún momento hemos tenido la percepción de que se traspasaba la línea" de las buenas prácticas con los extras del coche del presidente del Parlamento, sino que interpretó que ha habido una "campaña orquestada de linchamiento y una campaña muy clara para cuestionar y dejar bajo sospecha a las instituciones catalanas", especialmente si se trata de cargos de ERC.

GENERALITAT "BAJO SOSPECHA"

Consideró que hay una campaña para situar "bajo sospecha" todo aquello que hace la Generalitat bajo el pretexto de que "no es una institución como podría serlo una institución del Estado, y esto afecta a la política exterior y a determinado simbolismo, como las selecciones deportivas o la defensa de la lengua y la cultura catalanas".

"Somos conscientes de que todas las instituciones deben hacer un esfuerzo parea defender la transparencia", subrayó, y aseguró que es gracias a la entrada de ERC en la Presidencia del Parlamento y en el Govern que se publican los sueldos de diputados y cargos gubernamentales.

Para Puigcercós, la polémica sobre los extras del coche oficial de Benach "no existiría en torno al presidente del Congreso o sobre otras instituciones". "Este debate que tenemos aquí, en las instituciones del Estado, de Lisboa o de Praga no existen", aseveró.

BENACH, EN AUTOESTOP

Pero evitó responder si la mejor respuesta a esta "campaña de linchamiento sobre Ernest Benach y ERC" es la reacción de Benach de retirar de su coche oficial la mesilla de trabajo, el televisor y el reposapiés que hizo instalar para convertir el vehículo en una oficina móvil. Un gesto, la disculpa y rectificación de Benach, que no gustó a algunos dirigentes republicanos del entorno de Puigcercós.

"La decisión es de la Mesa del Parlamento y del mismo presidente, y yo no voy a entrar", dijo Puigcercós, que manifestó que "el presidente del Parlamento merece un respeto institucional".

"Parece que el presidente del Parlamento tenga que ir en autoestop. Hemos llegado a un punto casi de ridículo. Nadie cuestiona otras instituciones tan respetables como las diputaciones, los ministerios, el Congreso o el Senado" argumentó, y vio en la polémica un "intento de socavar y laminar" al Parlamento.