BARCELONA 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de ERC, Joan Puigcercós, instó hoy a CiU y al PSC a "demostrar su coherencia y su fuerza" de influencia sobre el Gobierno del PSOE en el debate de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), abandonando su "batalla sobre la paternidad" del traspaso de Cercanías a la Generalitat para garantizar los recursos que deben acompañarlo.
Puigcercós denunció la "triste polémica" sobre quién se "apropia" del traspaso de Cercanías que anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para antes de enero, convencido de que "es poco edificante y genera abstención esta batalla por la paternidad" del acuerdo con el PSOE.
En este sentido, emplazó a los dirigentes de CiU, Artur Mas y Josep Antoni Duran Lleida, a que "reconozcan el esfuerzo de negociación del Govern" para lograr este traspaso, aunque remarcó la "poca concreción" del anuncio de Zapatero y confió en que la Comisión Bilateral del 17 de julio fije "el calendario de recursos" a traspasar para la gestión de este servicio.
No obstante, Puigcercós destacó que "el lugar donde se han de plasmar en cifras estos recursos para Catalunya", tanto los que necesita el traspaso de Cercanías como "las inversiones previstas en la disposición adicional tercera del Estatut", es en el debate en el Congreso de los PGE.
En este sentido, recordó a la federación que las resoluciones "son sólo declaraciones de buenas intenciones si no van acompañadas de presupuestos", en referencia a la resolución de CiU sobre Cercanías aprobada por el PSOE en el Debate sobre el Estado de la Nación.
Por ello, instó a CiU y PSC a dejar de "apuntarse paternidades" y ser "coherentes" en los presupuestos para "hacer posible" el traspaso anunciado y las inversiones previstas en el Estatut.
Puigcercós denunció de nuevo la "falta de rigor y de seriedad" de Zapatero al hacer el anuncio de forma "electoralista" en el Debate del Estado de la Nación, cuando "el lugar idóneo para negociar y sacar a la luz los resultados es la comisión bilateral" Estado-Generalitat.
También calificó de "electoralista" la remodelación del Gobierno realizada por el presidente Zapatero, y la interpretó como la "constatación de que el PSOE sabe que está en deuda con Catalunya" porque "sabe que ha incumplido" son sus compromisos en el Estatut.
Por ello, Puigcercós advirtió a Zapatero de que no conseguirá mucho "viniendo a Catalunya a prometer que en la próxima legislatura se arreglará todo" y remarcó la "dificultad" de "hacer ese giro favorable a Catalunya" cuando "se ha mantenido" a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez en su puesto.
"CAROD Y BENACH ESTÁN DE ACUERDO" CON EL 'NO'.
En cuanto a las declaraciones del presidente del partido, Josep Lluís Carod-Rovira, que consideró un "error" el 'no' al Estatut y que fueron apoyadas hoy por el dirigente republicano y presidente del Parlament, Ernest Benach, Puigcercós consideró que "tanto Carod como Benach están de acuerdo" con que "el tiempo nos ha dado la razón" en el voto negativo, al constatarse "cada día que pasa un nuevo recorte".
Puigcercós defendió el texto de la resolución aprobado en el Consejo Nacional de este sábado, en el que se ratificó que "ERC no ganó el Estatut, el tiempo nos ha dado la razón y cada día que pasa la gente entiende mejor nuestro 'no'", algo en lo que consideró que los máximos dirigentes del partido también comparten.
Puigcercós señaló que "en el debate entre las bases" del partido sobre el voto al Estatut el 'no' era "un acuerdo total" y aseguró que toda la dirección del partido, en el Consejo Nacional, constató que "aquella decisión de voto la mantenemos y defendemos". "A lo hecho, pecho", resumió.
El secretario general apostó por "mirar hacia adelante" y asumir el texto legalmente aprobado para "desarrollarlos con la máxima ambición". Aun así, consideró necesario aunar esfuerzos con "mucha gente" de sectores sociales y económicos, además de políticos, para reclamar una nueva financiación que el Estatut no consiguió.
"Cada vez más gente entiende nuestra postura, tanto que hasta el presidente de CiU, Artur Mas, pidió que el Estatut se volviera a votar y si se ha de volver a votar no será para que vuelva a salir que sí", apuntó irónicamente.