Rajoy asegura que "nadie sabe qué es" el término realidad nacional, el cual, a los andaluces "no les importa"

CADIZ 12 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, aseguró hoy que "nadie sabe qué es" el término realidad nacional referido a Andalucía e incluido en la reforma de Estatuto de Autonomía, el cual, además, a los andaluces "no les interesa".

En su intervención tras presidir en Cádiz la Junta Directiva Regional del PP, Rajoy lamentó que la región "más universal de España, con mucha diferencia sobre las otras por razones culturales, geográficas e históricas" ahora "apueste por ensimismarse y encerrarse con un cambio de denominación, cuando su lema rezaba 'Andalucía por sí, para España y la Humanidad'".

A su juicio, ello es "una insensatez absurda" que atribuyó a una operación "de coartada y cortina de humo" del PSOE para evitar "los verdaderos problemas, tales como cohesión, solidaridad territorial, financiación o igualdad".

Así, recordó que populares y socialistas "habíamos llegado a un acuerdo razonable sobre la denominación de Andalucía", pero los segundos "tras el lío en Cataluña, encargaron 130 enmiendas para que ahora sea una realidad nacional", un término "que no sólo yo me pregunto qué es, hasta ex dirigentes del PSOE como Felipe González y Alfonso Guerra lo hacen".

Además, el dirigente popular criticó que "nos quieran hacer creer que la realidad nacional es lo que le importa a los andaluces, no es verdad, es una cortina de humo para no hablar de financiación autonómica, una irresponsabilidad del PSOE con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero a la cabeza".

"FLORECIENDO NACIONES POR DOQUIER"

En este sentido, lamentó que Zapatero "haya trasladado el absurdo lío de Cataluña a Andalucía y el resto de comunidades", de manera que "están floreciendo naciones por doquier, una broma, una pesadilla que le ha hecho a los españoles, mientras no saben nada de competencias, financiación o modelo de Estado".

Así, Rajoy aseguró que "vamos hacia un Estado sin competencias ni funciones, una España menguante que nadie quería" y a la que "no contribuiré, me dedicaré a cosas razonables", lamentando que desde 1978 "lo que era el país lo pactaban los grandes partidos, pero ahora se rompe el consenso por el disparate de comenzar a discutir qué es España, y es absurdo".

Ello lo atribuyó al actual Gobierno socialista "porque yo he pactado 20 estatutos con el PSOE, pero con los dirigentes de antes, con los que se podía llegar a acuerdos, ahora no, los estatutos no están para resolver los problemas de la gente, sino para creárselos", una situación que definió como "guirigay ridículo para el que no esperen contar con el PP".