San Gil acusa a Zapatero de "no hablar" de terrorismo para "tener la puerta abierta" a la negociación con ETA

Actualizado: lunes, 20 agosto 2007 15:45


BILBAO, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -

La presidenta del PP vasco, María San Gil, acusó hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de "no hablar" de terrorismo ni decir "una sola palabra que pueda molestar al mundo de ETA-Batasuna" para dejar "la puerta abierta" al proceso de negociación. Además, denunció el incremento de actos de violencia callejera y advirtió que "no se puede hacer como si no pasara nada", por lo que pidió una "reflexión seria".

San Gil realizó estas declaraciones esta mañana en una rueda de prensa en Bilbao acompañada del presidente de los populares vizcaínos, Antonio Basagoiti, y del secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio, tras la reunión del Comité de dirección del partido.

Asimismo, la presidenta del PP vasco tildó al lehendakari, Juan José Ibarretxe, de ser el político "que más da la espalda a los problemas reales de sus ciudadanos" y le acusó de "no tener una clara voluntad de poner punto y final al terrorismo callejero y a la existencia de ETA-Batasuna" y de "aprovecharse de la existencia del terrorismo".

KALE BORROKA

San Gil denunció el incremento del "terrorismo callejero" y explicó que "el año pasado se saldó con ocho actos de kale borroka frente a los 26 que hemos tenido este año en el mes de agosto". Así, pidió que se estudie esta situación con "sosiego y objetividad" pero advirtió que "no se puede hacer como si no pasara nada y que dentro de las fiestas populares se quemen autobuses, cajeros o se ataque a miembros de la Ertzaintza con cocteles molotov".

En ese sentido, calificó como "atentado puro y duro" el incidente ocurrido en la madrugada del sábado en Mutriku en el que varios encapuchados atacaron a agentes de la Ertzaintza con cócteles incendiarios.

Por ello, la popular pidió una "seria reflexión" y una "voluntad de atajar esta existencia del terrorismo callejero" y del hecho de que las fiestas "tengan que estar teñidas de las actuaciones de los violentos".

San Gil atribuyó este aumento de actos de kale borroka a que "los que forman parte de ese mundo se sienten mucho más cómodos" y a que "se sienten mucho más a sus anchas y han recuperado espacios que no les corresponden". Así, denunció que "no perciben una mano dura y contundencia democrática por parte de los dirigentes".

ZAPATERO

En este sentido, San Gil denunció que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en un reciente aparición pública en Jerez "no hiciera una sola mención al terrorismo callejero, la presencia de ETA o la extorsión a empresarios" y dijo que esto es "enormemente significativo" y que tiene "una enorme gravedad" que "no hablara del principal problema de los españoles". De este modo, le acusó de "dar la respalda a la realidad por intereses mezquinos".

"Eso deja traslucir claramente que en la mente de Zapatero ese mal llamado proceso de paz, que es un proceso de alianzas, sigue estando presente", apuntó. La popular señaló que Zapatero no dice "ni una sola palabra que pueda molestar al mundo de ETA-Batasuna" porque así sigue "dejando abierta la puerta a unos posibles contactos, reuniones y puestas en común" con la banda terrorista.

Además, San Gil acusó a Ibarretxe de seguir "con sus obsesiones" y de no tener "voluntad de poner punto y final al terrorismo callejero y a la existencia de ETA-Batasuna". "No se puede estar más alejado de la realidad, no hay un dirigente político que dé más la espalda a los problemas reales de sus ciudadanos como es Ibarretxe", sentenció.

Asimismo, denunció que éste "sigue empeñado en su consulta y su referéndum" pero que "no dice qué va a hacer para que nuestras fiestas y vida cotidiana deje de estar teñida por los que nos amargan las fiestas y la vida".

Por otro lado, le acusó de decir "frases ininteligibles" y de hablar de que "el ciclo político de ETA está acabado cuando a los dos días hay un atentado contra la Ertzaintza".

ELORZA

En cuanto a la polémica entre el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, y el consejero vasco de Interior, Javier Balza, después de que el primer edil donostiarra pidiera acabar con los actos de kale borroka en la Semana Grande, San Gil explicó que el cruce de acusaciones fue para "no enfrentarse a los problemas reales".

Así, pidió a Elorza "un poco de coherencia" y le acusó de ser uno de los dirigentes políticos "que ha tendido la mano a Batasuna" y de los que "quiere que Batasuna vuelva a las instituciones".

"Elorza se sintió molesto porque se quemó un autobús en el centro de San Sebastián pero cuando ocurre en otras ciudades o ANV está en otros ayuntamientos y se intenta impedir la vida democrática no hemos oído ninguna queja suya", explicó.

De este mismo modo, dijo que "hay que ser coherente" y "no sólo cuando hay un interés personal e inmediato hacer este tipo de declaraciones". "Lo que vino a decir es que era poco menos que una travesura", añadió.

Asimismo, se refirió a la respuesta del consejero de Interior a las declaraciones de Elorza, recordando que el PSE "había negociado con Batasuna en Loiola". De este modo, San Gil denunció que "esto es un país de locos" porque "todos han estado echándose la culpa unos a otros pero ninguno ha apuntado con el dedo a ETA-Batasuna".

"Si se pusieran a hacer su trabajo nos iría mucho mejor, pero como todos tienen intereses mezquinos y proyectos políticos que se benefician por la existencia de ETA-Batasuna son incapaces de señalar al culpable de todo", dijo.