San Gil dice que el proceso "no está roto sino sumergido" y acusa a Zapatero de "querer ganar tiempo hablando de unidad"

SAN SEBASTIAN, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -

La presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, acusó hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de "querer ganar tiempo hablando de la unidad de partidos" para que pase la "conmoción" del atentado de Barajas. A su juicio, "el proceso no está roto, está sencillamente sumergido" y el Gobierno "lo que quiere es ganar tiempo para que el proceso vuelva a salir a la superficie y volver a hablar de diálogo, pacto y de negociación con quienes son los responsables de los atentados del día 30".

San Gil compareció en una rueda de prensa en la nueva sede del PP en San Sebastián, junto a sus compañeros de formación Leopoldo Barreda y Carmelo Barrio, para dar cuenta de la reunión del Comité Ejecutivo Regional en la que los populares analizaron la situación política.

La dirigente popular aseguró que su formación exigirá "de forma tenaz" la aplicación de "políticas reales que quieran derrotar al terrorismo" y se mostrará "muy exigente a la hora de decirle tanto al Gobierno central como al Gobierno vasco que no se puede andar en estos momentos con ambigüedades ni con medias tintas y que se exige una respuesta contundente por parte de ambos Gobiernos".

En su opinión, el Gobierno central está ofreciendo una política antiterrorista "que no sabemos en qué consiste, en donde no se habla de rectificaciones y de errores cometidos, algo que no sabemos concretar porque el propio presidente del Gobierno no es capaz de definir en qué se basa".

Por ello, criticó que los socialistas hablen de "unidad de partidos" al tiempo que recordó que "esa unidad existía en 2003 en el Pacto por las libertades y contra el Terrorismo, que concitaba a la mayoría de los ciudadanos españoles, estaba suscrito por los partidos mayoritarios de este país"."No entendemos por qué abandonaron esa unidad en la derrota del terrorismo para unirse con partidos nacionalistas que nunca han querido derrotar a ETA".

"OTRO ENGAÑO MAS"

Para San Gil, hablar de esa unidad es "otro engaño más" porque "no está destinada a buscar la derrota del terrorismo, sino a buscar el pacto, el diálogo y la negociación con una ETA-Batasuna que no ha cambiado un ápice y ha hecho lo único que sabe hacer que es sembrar dolor, amargura y asesinar".

En ese sentido, acusó al Gobierno de Zapatero y al Gobierno vasco de "querer ganar tiempo, esperar a que pasen los días y las semanas para que la conmoción resultante del atentado pase y volver al proceso y a la negociación". A su juicio, esta es "un engaño y una trampa" porque "no hay una voluntad real de los demás partidos de derrotar a ETA y quieren engañarnos a todos haciéndonos creer que ETA-Batasuna ha cambiado, que ha dado muestras de que quiere volver a las vías democráticas, pero sabemos que el absolutamente imposible".

"No nos vamos a dejar engañar por las palabras huecas y ambiguas de Zapatero y vamos a estar muy atentos en la verificación de cuál es su política antiterrorista, cuál es su actitud respecto a Batasuna en las siguientes elecciones municipales, en relación con la mesa de partidos, con Navarra o la actitud del Fiscal general del Estado en esos procesos que están abiertos y que van a demostrarnos verdaderamente que es lo que quiere hacer el Gobierno", afirmó.

"CONDENA"

María San Gil insistió en la exigencia de que Batasuna condene el atentado de Barajas, "que no se le haga ningún caso a Arnaldo Otegi y que el Gobierno aplique las políticas antiterroristas que fueron altamente eficaces". Según dijo, a Batasuna "no le interesa romper el proceso porque tiene unos objetivos a conseguir que son inasumibles como presentarse a las elecciones".

En su opinión, lo importante de las declaraciones de Otegi de ayer es "que no condenó los dos asesinatos de la T4" y, por ello, "no se le puede hacer ningún caso a quien no es capaz de condenar". "Sus palabras deberían ser papel mojado y nadie debería hacerle el más minino caso", añadió al tiempo.

Asimismo, pidió a los Gobiernos vasco y central que sean "más exigentes" con la condena del terrorismo por parte de Batasuna y "dejar de hacer creer que existen gestos" por parte de la formación abertzale porque "Batasuna es ETA y así lo dijo el Tribunal Supremo".

Por último, afirmó que la postura del PP "no cambia de lo que han venido diciendo en los meses y años anteriores" y que "nadie tiene mas ganas que nosotros de derrotar a ETA y de acabar con la lacra que nos viene amargando la existencia desde hace ya 40 años".

A su juicio, "la filosofía que estaba impresa en lo que era el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo es la que tiene que guiar al Gobierno y es la única que nos puede llevar de verdad a que derrotemos a ETA".