UE.- El Parlamento Europeo entrega su Premio Sajarov a la libertad de conciencia al líder de la oposición de Bielorrusia

ESTRASBURGO, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Pleno del Parlamento Europeo entregó hoy el Premio Sajarov 2006 a la libertad de conciencia al líder de la oposición en Bielorrusia, Alexander Milnkevich, que aseguró que el régimen dictatorial de Alexander Lukashenko atraviesa por "momentos difíciles" y que "dentro de poco Bielorrusia volverá a la familia europea y será de nuevo un Estado libre y democrático" y pidió la creación en la UE de un Fondo Europeo para la Democracia para ayudar a países bajo dictaduras como el suyo.

En su discurso ante la Eurocámara, Milinkevich recordó a los miles de personas, particularmente jóvenes, que salieron a las calles por todo el país el pasado mes de marzo para protestar contra el fraude de unas elecciones que volvieron a dar la mayoría a Lukashenko. También a los que se encuentran en prisión, a los "expulsados" de sus trabajos y universidades y también a quienes "han sido desaparecidos sin dejar rastro o han sido asesinados".

Agradeció al Parlamento haber sido reconocido con el Premio Sajarov que, en su opinión, supone "una toma de conciencia por parte de Europa sobre la situación en Bielorrusia" y es "un signo de reconocimiento en el futuro europeo" para el país.

Por su parte, el presidente de la Eurocámara, Josep Borrell, destacó que Milinkevich "tuvo el valor de retar al último régimen dictatorial de Europa" y "se ha convertido en el símbolo de la resistencia contra la opresión y de la esperanza en un futuro democrático", una aspiración que, dijo, "compartimos con la sociedad bielorrusa el derecho a elegir a sus líderes, a una información independiente, a crear ONGs y contar con un poder judicial independiente e imparcial".

Borrell recordó que ésta no es la primera vez que el Parlamento entrega su Premio Sajarov a ciudadanos bielorrusos, puesto que en 2004 fue galardonada la Asociación Bielorrusa de Periodistas. A este respecto, admitió que el premio "no ha surtido el efecto que esperamos", puesto que desde entonces "la situación ha empeorado, el régimen es más duro y los opositores sufren más".

EMBARGO ECONÓMICO

Durante su discurso, Milinkevich se refirió a algunas acciones tomadas desde el exterior, por la UE o por Rusia, por ejemplo, algunas de las cuales podrían suponer un perjuicio adicional para los ciudadanos bielorrusos, como un embargo económico por parte de la UE o la amenaza rusa de detener las preferencias comerciales que reconoce al país.

En rueda de prensa, rechazó un eventual embargo económico que, dijo, "en el fondo, afectan a la gente de la calle", no a las autoridades. Por otra parte, denunció las condiciones que ha impuesto Moscú para evitar un posible fin de las preferencias comerciales rusas -que revertirían, por ejemplo, en una subida del precio del gas_y que, en su opinión, "significaría la pérdida ineluctable por parte de Bielorrusia de su soberanía".

Por el contrario, celebró la decisión de la UE de impedir la entrada en su territorio al presidente Lukashenko y reclamó que no se eleve el precio de los visados, que a partir del 1 de enero de 2007 costará 60 euros y que "prohibiría" los "necesarios contactos con occidente" que necesitan los ciudadanos de su país.

Apreció la ayuda europea en apoyo de "medios de comunicación libres, apoyo a la sociedad civil y a las personas reprimidas", pero apuntó que "los programas de la UE se elaboran para países que ya están en la vía de la democratización y las reformas" y que, por tanto, "no pueden funcionar en el caso de Bielorrusia". Por este motivo, Milinkevich reclamó que la UE cree un "Fondo Europeo para la Democracia", con "medios reales para trabajar con los países dictatoriales".