MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente del grupo parlamentario de ERC en el Congreso, Agustí Cerda, trasladó hoy su "más sentido pesar" a la familia de Carlos Palomino, el "joven antifascista" asesinado ayer en Madrid, y pidió investigar las conexiones de miembros de grupos ultraderechistas con las Fuerzas de Seguridad y el Ejército.
A través de un comunicado, Cerdà comentó que si se confirma que el presunto asesino de Palomino es miembro del Ejército debe abrirse "una profunda reflexión e investigación de las posibles conexiones de la ultraderecha xenófoba y racista con determinados cuerpos de seguridad del Estado y de las Fuerzas Armadas" porque, según comentó, "ya se ha dado más de un caso, y de dos".
Cerdà, quien hizo extensivo su pesar "a todos los colectivos que plantan cara al fascismo en Madrid", denunció que "la impunidad de que goza la ultraderecha xenófoba en determinadas zonas y ciudades del Estado lleva a episodios tan desgraciados como el del vil asesinato del joven antifascista madrileño" que, recalcó, sólo tenía 16 años.
En este sentido, subrayó que Esquerra y la izquierda valenciana "se han cansado de denunciar la impunidad con que se mueven los ultras" en esta comunidad, especialmente en la ciudad de Valencia, que "tiene el triste récord de agresiones y asaltos impunes a militantes y sedes de colectivos y partidos de izquierda y nacionalistas".
NO AUTORIZAR MANIFESTACIONES XENÓFOBAS.
Para Cerdà, es "sorprendente" que mientras otras manifestaciones se prohíben, sí se autoricen las de Democracia Nacional, que tienen un "claro signo xenófobo y provocador" y que es seguro que acabarán "en bronca" porque los ultras las convocan "en barrios obreros y con un alto índice de nueva inmigración". "En Valencia ya lo han hecho endeterminadas ocasiones y siempre han terminado en agresiones de los ultras contra vecinos e inmigrantes", explica.
En este contexto, remarcó que en Valencia "la impunidad ultra y anticatalanista" se ha cobrado decenas de heridos e incluso víctimas mortales como el joven Guillem Agulló, asesinado en 1993, y cuyo caso, indicó Cerdà, recuerda "al de Carlos Palomino por la impunidad y cobardía con que ambos fueron asesinados y por la juventud y el compromiso de lucha contra el fascismo que compartían".
