Subraya que la presidencia de la UE dará a España una gran ocasión para aumentar su presencia y proyectar sus intereses en el mundo
MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, considera que España está "especialmente capacitada" para desempeñar en la escena internacional el papel de "mediador fiable", de "puente entre culturas y bloques regionales", en un momento en que "el mundo necesita una interlocución internacional basada en la empatía y el diálogo".
Así se expresa Zapatero en el artículo 'Los retos de España en un mundo multipolar', publicado hoy por la Fundación Ideas como parte de una serie de textos que los miembros del Ejecutivo remitirán a la fundación del PSOE sobre la presidencia española de la UE, que comienza el próximo 1 de enero.
A su juicio, España tiene "fortalezas sobre las que construir un proyecto de liderazgo exterior", especialmente en su "perfil de país multicultural", para llevar a cabo un "papel importante en el nuevo orden internacional" que es "multipolar" y "en un contexto de tensiones entre culturas".
"En un mundo interdependiente la defensa de nuestros intereses pasa por tener capacidad de acción en el exterior", sostiene Zapatero, que opina que para este objetivo la presidencia española de la UE brindará una buena oportunidad.
En este sentido, apunta que "es a través de la UE como más y mejor podemos proyectar los intereses de España en el mundo" y que nuestro país "debe ser el puente y la puerta de culturas para Europa". Para Zapatero por su historia y su cultura, España tiene una "vocación mundial" y será "más útil para Europa" y también más fuerte en el seno de la UE a medida que cumpla con su "vocación de presencia global".
El jefe del Ejecutivo recalca que el fortalecimiento de la UE será "la mejor vía para potenciar la presencia de España en el mundo" y, con ese fin, se marca como primer objetivo la puesta en marcha del Tratado de Lisboa --que creará un presidente semipermanente de la Unión--.
REFORMA DE LA ONU
El jefe del Ejecutivo asegura así que la presidencia española de la UE "tendrá como prioridad dar una voz fuerte y unida a la UE en el mundo" y, además, esboza otras prioridades de su política exterior, especialmente lograr una "gobernanza global efectiva" para hacer frente a los "retos globales", empezando por la reforma de los foros multilaterales y en primer lugar, de la ONU.
"Debemos dotarles de mayor representatividad y legitimidad y lograr así mejorar su operatividad y eficacia", sostiene el presidente, a pesar de que hace sólo un mes, durante su visita a la sede de la ONU, recalcó que en estos momentos de recesión lo prioritario no era la reforma de la ONU sino la economía y la lucha contra el cambio climático.
En este sentido, Zapatero opina que el G20, en cuyas reuniones España participa desde hace un año, "es un buen ejemplo" de gobernanza global y que se debe "extender esta capacidad de colaboración con otros retos globales, como el de la seguridad". Así, propone reforzar el Tratado de No Proliferación Nuclear "a corto plazo" y, en un horizonte más largo, "el gran objetivo marcado por el presidente Obama de un mundo sin armas nucleares".
"TOTAL SINTONÍA" CON OBAMA
En su texto, Zapatero se refiere al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en tres ocasiones y, además, destaca que durante su reciente entrevista ambos constataron una "total sintonía". Estados Unidos, el Magreb e Iberoamérica serán regiones clave durante la presidencia española de la UE, en la que también se intentará buscar una presencia creciente en Asia.
Eso sí, aclara que el Gobierno no olvida "la lucha contra el terrorismo y el crimen organizado" y los conflictos de "Afganistán u Oriente Medio, cuyo enquistamiento supone una constante amenaza de seguridad para todos".
Por otro lado, el jefe del Ejecutivo subraya su apuesta por afrontar "los grandes desequilibrios sociales y medioambientales" del mundo y por cumplir los Objetivos del Milenio de lucha contra la pobreza, en especial en África, "que sigue siendo la gran herida moral del mundo".
En este objetivo, recuerda el compromiso de España con todas las iniciativas para hacer frente a la "sangrante" cifra de 1.000 millones de personas que pasan hambre y llama también a lograr un acuerdo de reducción de emisiones en la próxima Cumbre Copenhague sobre el cambio climático.
Zapatero pone de relieve además su participación en el G20 y su iniciativa de la Alianza de Civilizaciones que, en su opinión, aunque fue recibida con "escepticismo" por "algunos" ahora "podrá poner todo su potencial al servicio del multilateralismo eficaz por el que la comunidad de naciones quiere decantarse como quedó bien claro tras la intervención del presidente Obama en la última Asamblea General de Naciones Unidas".
Por último, insiste en que su política exterior es una política "comprometida con los valores progresistas y solidarios" de los españoles y que refleja lo que es hoy España: "un país decente, moderno, con confianza", "comprometida con las necesidades de los que menos tienen y alimentada por el compromiso social de los españoles".
Una política exterior, concluye, "idealista pero no ilusa, ambiciosa pero pragmática" y que combina "vocación de cooperación y diálogo con la determinación para actuar con firmeza en defensa de los valores democráticos, los derechos humanos y la seguridad". "Y consciente siempre de que, en un mundo globalizado, los retos de España tienen buena parte de su origen y solución fuera de nuestras fronteras", añade Zapatero.
