López Garrido tacha de "frívola" la justificación de PP para mantener su "estrategia de bloqueo" de las instituciones
MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Eduardo Zaplana, esgrimió hoy la última propuesta del PSOE en la frustrada renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para denunciar que los socialistas pretendían colocar en este órgano a "familiares y militantes" tal y como han hecho, a su juicio, desde el principio de la legislatura en otras entidades. Aunque no dio nombres, aludía a una hermana del fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido.
El dirigente 'popular' realizó estas afirmaciones en el transcurso de un debate con el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Diego López Garrido, organizado por el Forum Europa para hacer balance de la primera legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno.
Fue en el bloque dedicado al funcionamiento de las instituciones en el que Zaplana aprovechó para justificar la negativa de su grupo a seguir adelante con las negociaciones que se abrieron para renovar el CGPJ, que lleva en funciones 14 meses. El portavoz del PP sacó el papel con los nombres que el PSOE propuso para integrarse en el órgano de gobierno de los jueces, aunque aseguró que no haría públicos los candidatos socialistas.
"No lo voy a entregar, no lo he sacado nunca", comentó, añadiendo que lo que hizo su partido al romper las conversaciones fue "impedir que el CGPJ sean familiares y militantes del PSOE". "A mí me parece que el Consejo General tiene que ser otra cosa", apostilló Zaplana, quien prefirió "ahorrarse" contar a qué personas proponían para este órgano formaciones "radicales", entre las que citó a ERC e ICV.
UNA HERMANA DE CONDE PUMPIDO.
Aunque ninguno de los dos dieron nombres, en su réplica, López Garrido sí aludió a que entre los candidatos propuestos por las asociaciones judiciales había "familiares de un cargo público español designado por el Gobierno". "¿Esa es la razón por la cual se bloquea el CGPJ? ¿porque una persona era la amiga o la hermana de un cargo público?", interrogó a su homólogo 'popular'.
En la lista de candidatos que las asociaciones judiciales registraron en su día en el Congreso, dentro de la cuota correspondiente a Jueces para la Democracia aparecía, como segunda 'suplente', Teresa Conde Pumpido Tourón, magistrada del Tribunal Superior de Justicia de Galicia y hermana del fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido.
Ante las acusaciones del 'popular', López Garrido respondió pidiendo a Zaplana que asuma que el PP rehusó llegar a un acuerdo sobre el CGPJ porque desde el inicio de la legislatura puso en marcha una "estrategia de bloqueo de las instituciones". "No convirtamos esto en un tema puramente frívolo o anecdótico porque ha habido una estrategia bloqueo de todo", afirmó.
Con esta misma tesis, el portavoz socialista afeó al PP haber impedido también la renovación del Tribunal Constitucional, e incidió en que, en su estrategia, el partido de Mariano Rajoy llegó incluso a ganarse una reprimenda del Alto Tribunal por intentar defraudar la ley para recusar a dos magistrados.
También se culparon mutuamente de no haber podido modificar el Reglamento del Congreso, pese a que PSOE y PP llegaron a acordar el grueso de esa ansiada reforma. Mientras Zaplana alegó que el PP no pactó porque los nacionalistas querían "que en el Parlamento español se hablara euskera y catalán", López Garrido recordó que el PP mantuvo su "veto", pese a que, al final, las minorías renunciaron a incluir formalmente en el Reglamento el uso de las lenguas cooficiales.
"4 AÑOS MÁS DE CESIONES A LOS NACIONALISTAS".
Según Zaplana, la cesión del PSOE ante los partidos nacionalistas ha sido uno de los problemas básicos de esta legislatura y lo volverá a ser si el PP no gana el próximo 9 de marzo. Además, dejó muy claro que los consensos básicos que PSOE y PP venían manteniendo desde la Transición, y cuya ruptura achaca en exclusiva a los socialistas, sólo se recuperarán cuando los 'populares' vuelvan a Gobierno.
En este contexto, pronosticó que "si gana el PSOE lo que se recuperarán serán los consensos con los nacionalistas y los soberanistas". "Serán cuatro años más de continuidad", auguró, enfatizando que el PP promoverá la unidad contra ETA y garantizará la igualdad de todos los españoles, su derecho a utilizar el castellano y que se pueda manifestar el orgullo de ser español.
Con ironía, López Garrido agradeció a Zaplana que hubiera explicado con tanta claridad lo que definió como "el dogma" del PP, que, según dijo, a diferencia de lo que practica el PSOE, consiste en llegar a acuerdos sólo cuando se está en el poder porque los 'populares' están convencidos de que el consenso "favorece al Gobierno".
"PAZ TERRITORIAL" CON EL APOYO DEL PP.
El hecho de que en esta legislatura, "por primera vez el Gobierno y los nacionalistas más radicales hayan creado un frente contra el primer partido de la oposición", es lo que ha llevado a que, por ejemplo, ahora haya en el horizonte dos propuestas de referéndum de autodeterminación, una en Cataluña y otra en el País Vasco.
Este fue el principal argumento utilizado por Zaplana para descalificar la política territorial del PSOE, una tesis de López Garrido rebatió recalcando que el PP ha votado todos las reformas estatutarias aprobadas en esta etapa, con excepción de la catalana, y que, precisamente por eso, esta legislatura el modelo territorial se ha desarrollado en "paz" y "de manera modélica".
"Mire señor Zaplana, España no se ha roto y está más fuerte y cohesionada que nunca", espetó a su contrincante dialéctico, emplazándole a no "insultar" a los afiliados del PP y recordando que el primer estatuto que se cambió fue el valenciano. Zaplana le contestó que si el PP se sumó a las reformas fue por "responsabilidad" y para "paliar" las que estaban proponiendo los socialistas.
SOLO UNA COINCIDENCIA: VIOLENCIA DE GÉNERO.
A lo largo de su hora y media de debate, Zaplana y López Garrido sólo coincidieron en un punto: el fracaso en la lucha contra la violencia contra las mujeres. El primero en sacar el tema fue el representante del PP quien una vez más denunció los "dramáticos resultados" que, a su juicio está dando la Ley contra la Violencia de Género. "Estoy de acuerdo. No estamos acertando o no hemos sabido, entre todos atajar esta lacra", agregó el socialista.
A partir de ahí, en el bloque dedicado a la política social, como en los demás, todo fue una reiteración de las acusaciones mutuas en materia de inmigración, dependencia o políticas de igualdad, que ambos se han dedicado en los últimos meses. Zaplana llegó a afirmar que "la política social ha brillado por su ausencia en la legislatura", una afirmación que López Garrido afrontó recordando las subidas de las pensiones y del salario mínimo, los 2.500 euros del 'cheque bebé' o las ayudas al alquiler.
Además, el portavoz socialista aprovechó su último turno para hacer un apunte sobre el caso de las sedaciones del Hospital Severo Ochoa de Leganés (Madrid). En concreto, denunció que se pusiera "en la picota" a los médicos del centro "por razones ideológicas" y que, después de que estos hayan sido "rescatados del deshonor" no se haya producido la "asunción de responsabilidades de la presidenta de la Comunidad de Madrid", Esperanza Aguirre.
