SEVILLA 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, pedirá en el Pleno municipal que se celebrará la próxima semana que el concejal de Ermua que fue secuestrado y asesinado por ETA hace once años, Miguel Ángel Blanco, tenga una calle en la ciudad para "que siempre esté en nuestra memoria".
Zoido hizo este anuncio durante su intervención en un acto en homenaje a las víctimas del terrorismo organizado por el PP-A, al que asistieron el presidente regional del partido, Javier Arenas; la hermana del concejal asesinado, María del Mar Blanco; Teresa Jiménez Becerril --hermana del concejal del PP en el Ayuntamiento de Sevilla Alberto Jiménez Becerril, también asesinado por ETA junto a su esposa, y numerosos alcaldes del Partido Popular.
"Miguel Ángel Blanco entregó su vida por la libertad sin que hubiera querido perderla y se convirtió en un referente de la movilización y concienciación ciudadana", señaló Zoido, cuando hoy se cumplen once años del secuestro del concejal, que acabó en asesinato.
Expresó que quiere que Sevilla "se vuelva a unir de nuevo como hizo en aquel julio del 97 y que todos pidamos que el nombre de Miguel Ángel Blanco esté siempre con los sevillanos". "Es esta la razón por la que pediremos al pleno del Ayuntamiento de Sevilla que Blanco tenga una calle en nuestra ciudad para que siempre esté en nuestra memoria", dijo.
Para el portavoz popular, es "de justicia recordarle y mantener su estela de compromiso con la sociedad porque Miguel Ángel no pudo escuchar todos los gritos de apoyo cuando ETA le secuestró".
Según agregó, la primera vez que muchos niños sevillanos "salieron a la calle a reivindicar algo fue durante la liberación de un mártir, hijo de un albañil que entró en política para dar testimonio de su fe por cambiar las cosas y para luchar desde dentro", mientras que los etarras "hablaron con la humillación, con la tortura y la muerte".
Para Juan Ignacio Zoido, Sevilla "vivió la muerte de Miguel Ángel como suya, como algo personal e intransferible y por eso queremos que su recuerdo esté siempre con nosotros".
"La miseria de unos fanáticos acabó un día con su vida, pero no podrán acabar con su recuerdo y su ejemplo de democracia para todos los sevillanos, que cuando pasen por la calle que lleve su nombre se acuerden de un hombre que ha sido y será camino de dignidad y libertad", concluyó.