PAMPLONA 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, Francisco Pérez, afirmó esta mañana, con motivo de la celebración del 50 aniversario de la Misión Diocesana de Navarra, que a nivel mundial la Iglesia está más fuerte pese al "constipado espiritual" de Europa.
Moseñor Pérez ofreció una rueda de prensa acompañado de Valentín Eguílaz, delegado de Misión Diocesana de Navarra y misionero retornado de Ruanda; Ángel Echauri, delegado de Misiones, y los misioneros retornados Mertxe Reta y Fernando Jorajuría.
El arzobispo destacó la "riqueza" misional de la Iglesia de Navarra y destacó como ejemplo de ello la figura de San Francisco Javier, "sin duda paradigma del misionero navarro".
Asimismo, quiso recalcar la labor de todos los misioneros anónimos, que a su juicio, "han hecho mucho". "Basta ver lo que han hecho los misioneros para comprobar la grandeza también del pueblo navarro", apuntó.
Según el arzobispo, "aun cuando en Europa estamos pasando por momentos de constipado espiritual, no obstante a nivel mundial, la Iglesia es mucho más fuerte que en años precedentes". "Cada año se instauran o se constituyen nuevas más de 20 diócesis anualmente en el mundo, señal de que está creciendo mucho África y comienza a crecer mucho Asia", apuntó.
Por último, quiso dar la enhorabuena a Navarra en estas bodas de oro de la misión diocesana y pidió por que la Iglesia de la Comunidad foral "pueda sustentar en un futuro alguna misión concreta en alguna parte de América o de África" y por abrir "nuevos lugares de evangelización".
Por su parte, Valentín Eguílaz, delegado de Misión Diocesana de Navarra y misionero retornado de Ruanda, dijo que en este aniversario "nos corresponde celebrarlo y renovar el compromiso de seguir colaborando en la Misión Universal de la Iglesia".
"Ahora nos corresponde ser misioneros cuando los seminaristas son pocos y a los seglares también les cuesta salir para unos años, les cuesta comprometerse", apuntó.
Ángel Echauri, delegado de Misiones, recordó "el principio de la corresponsabilidad de los obispos, en cuanto miembros del Colegio Episcopal, en la Evangelización del mundo". Y recalcó "su responsabilidad, en unión con el Papa, de la marcha y del deber misionero de toda la Iglesia". "Los obispos tienen que tomar más honda conciencia de esta alta responsabilidad", apuntó.
Por último, señaló que "gracias a la encíclica del Papa Pío XII en 1957 titulada 'Fidei Donum' más de 200 sacerdotes y docenas de seglares partimos en misión a América y África". "Cada sacerdote no se ordena sólo para la parcela de su parroquia sino para toda la iglesia allí donde más falta haga", concluyó.
"DE IGUAL A IGUAL"
Mertxe Reta, misionera retornada de Venezuela, destacó desde su experiencia que "la relación entre los misioneros y los pueblos en los que recalan debe ser de igual a igual". "Cuando los misioneros vamos a otro país, nos planteamos, en primer lugar, conocer el modo de pensar y de vivir de sus gentes". "Cuando retornamos es mucho más lo que hemos recibido que lo que hemos podido dar", aseguró.
Según Mertxe Reta, "la realidad de marginación y pobreza interpela al misionero que experimenta un cambio radical en la vivencia personal de la fe y el enfoque con el que se lee la realidad".
También en tareas de educación, tanto formal (en colegios), como no formal (orientada a los jóvenes y adultos excluidos). En cuanto a la salud se coordinan programas de prevención, de nutrición, centros de acogida con hospitales y centros de salud.
Destacó el trabajo a nivel comunitario con todos los grupos humanos y, sobretodo, la importante promoción de la mujer, a través de formación de cooperativas, grupos de producción, grupos de Derechos Humanos y promotores comunitarios de salud, entre otros.
Resaltó la labor de los más de 1.300 misioneros navarros repartidos por los cinco continentes, pero señaló que "no se puede evitar cierta preocupación por la falta de relevo con misioneros jóvenes". "Por eso queremos animar los sacerdotes jóvenes y a tantos laicos con sensibilidad misionera a que no tengan miedo y den el paso", añadió.
ACTIVIDADES DURANTE TODO EL AÑO
Con motivo de la celebración de este 50 aniversario hay previstas ocho actividades desde el próximo mes de marzo hasta diciembre que pretenden, por un lado, "mirar al pasado con agradecimiento y, por otro, renovar el compromiso misionero", señaló Fernando Jorajuría, misionero retornado de Ecuador.
A lo largo de todo el año se realizarán más de 50 charlas y encuentros con diferentes sectores de la Iglesia en Navarra para dar a conocer la realidad de Misión diocesana de la Comunidad foral (juventud, familia, educación, catequesis, etc).
Se elaborará un DVD sobre la historia de Misión Diocesana de Navarra y las misiones, que estará disponible para grupos, parroquias y para cuantos lo soliciten.
En junio habrá un festival folclórico en el que colaborarán asociaciones de inmigrantes procedentes de África y América. En el mes de septiembre se trabajará un documento base con el Consejo del Presbiterio y el Consejo de Pastoral con el objetivo de implicar a más misioneros de cara al futuro. También en septiembre se creará un espacio diocesano de preparación, formación y discernimiento para jóvenes con inquietud misionera.
Además, se está escribiendo un libro de la historia de Misión Diocesana con el objetivo de publicarlo en septiembre, en el que están colaborando misioneros retornados, sacerdotes y seglares.
En octubre se organizará una exposición interactiva sobre la contribución directa de la Iglesia Diocesana a la Misión universal en estos 50 años. Los actos conmemorativos finalizarán en diciembre con un encuentro festivo de misioneros, familiares y amigos.