PAMPLONA, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Navarra ha recordado que, en materia de inspecciones y revisiones de gas, la reglamentación vigente establece que en instalaciones alimentadas desde redes de distribución (gas natural o propano), la inspección periódica debe hacerse cada cinco años, previa comunicación por parte de la empresa distribuidora con una antelación mínima de cinco días, con personal propio o contratado.
Por lo que respecta a instalaciones no alimentadas desde redes de distribución (bombonas de gas butano o propano), corresponde a los titulares o a los usuarios actuales de las mismas encargar una revisión periódica de la instalación a una empresa instaladora de gas habilitada, y también debe realizarse cada cinco años. En ambos casos, si la visita ofrece un resultado favorable se entregará al usuario un certificado de inspección o revisión, que deberá conservarse a disposición de la empresa distribuidora.
Por ello, cualquier actuación no programada con la debida antelación deberá ser denegada por el usuario, así como cualquier pago inmediato de actuaciones no solicitadas por él, según ha informado el Gobierno foral en un comunicado.
Esta recomendación viene dada por el aumento de las quejas y denuncias registradas por el Ejecutivo navarro, a través del Servicio de Consumo y Arbitraje y Policía Foral, respectivamente, por la actuación de personas que se presentan en los domicilios para, presuntamente, realizar inspecciones y revisiones no comunicadas ni solicitadas.
El Gobierno de Navarra, asimismo, insiste en la importancia de que estas actividades sean realizadas por empresas y personal debidamente autorizado, cuyo listado puede consultarse en el registro industrial. El Servicio de Consumo y Arbitraje dispone de un número de teléfono, 848 42 77 33, en el que puede consultarse cualquier duda que pueda surgir al respecto, así como en el resto de oficinas de información al consumidor (Tudela, Tafalla, Estella, Sangüesa, Alsasua y Santesteban).