PAMPLONA, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Plan Estratégico de Cultura (PEC) que promueve el Ayuntamiento apuesta por la creación de una Mapa Cultural de Pamplona como una herramienta útil para los gestores de las políticas culturales, los creadores, los artistas y los usuarios. En ese mapa se recogerán los equipamientos disponibles en la ciudad y las actividades programadas, tal y como se describe en el avance del informe - diagnóstico del PEC que se encuentra en proceso de elaboración.
Esta herramienta permitirá a los gestores de las políticas culturales públicas conocer el grado de intensidad del conjunto de la programación por disciplinas, la extensión de las actividades en determinados barrios o las carencias de oferta para determinadas franjas de edad del público. También servirá para que los operadores privados puedan contemplar las características globales de la programación cultural de la ciudad, adaptar sus ofertas y proponer innovaciones.
La actualización continua de ese Mapa Cultural hará posible la edición de un boletín periódico con toda la oferta dirigido a los usuarios y un blog para facilitar la interlocución entre programadores y público.
El concejal delegado de Educación y Cultura, Fermín Alonso, ha presentado en la comisión de Asuntos Ciudadanos un avance del informe - diagnóstico del Plan Estratégico de Cultura. La semana del 24 al 28 de octubre, el Ayuntamiento de Pamplona convocará diferentes reuniones con los grupos de trabajo del PEC para darles a conocer la primera versión del diagnóstico.
GASTO EN CULTURA POR ENCIMA DE LA MEDIA ESPAÑOLA
El estudio señala que la población de Pamplona está en condiciones de generar una demanda global de cultura, diversa y relativamente alta, segmentada en cuatro espacios: el familiar (padres e hijos), el de los jóvenes (dependientes, pero que consumen fuera de la familia), el de los mayores inactivos y el de los que concentran el grueso de los recursos, pero a costa de una dedicación prioritaria al trabajo. Otro factor que se analiza es el de la educación, con un 66% de la población, según el censo de 2001, con estudios de Secundaria o superiores.
El informe recoge datos sobre el gasto en cultura de las familias de Navarra, un gasto que, según cifras de la Encuesta de Presupuestos Familias de 2008 del Instituto Nacional de Estadística, ascendió a 395 euros, un 9% más que la media española. Esa cantidad supone un 1,29% de la renta per cápita de los navarros frente al 1,51% de la media del país. Además, entre 2006 y 2008, ese gasto en cultura creció en la Comunidad Foral pasando de 242,4 millones de euros a 244,8 millones.
Analizando el gasto, el 43% está destinado a equipos y accesorios audiovisuales de tratamiento de la información e internet; el 29% a servicios culturales, el 205 a libros y publicaciones periódicas y el 8% restante a otros bienes y servicios.
El avance del diagnóstico refleja asimismo un desfase entre el interés y la práctica cultural. La población de Navarra, excepto para la lectura de diarios, muestra menos interés para todas las actividades culturales que en cualquier otra zona de España. Se entienden como actividad cultural escuchar música, acudir a conciertos, lectura de libros y diarios, ir a bibliotecas, exposiciones, museos, galería de arte, teatro, cine, lírica, danza o bertsolarismo.
En el análisis de los hábitos, prácticamente todas las actividades se llevan a cabo en Navarra por encima de la media española. En la evolución del interés por las actividades culturales en los últimos cinco años mejoran la lectura de libros y la asistencia a espectáculos líricos, mientras descienden el interés por el cine y por los conciertos.
COMPATIBILIZAR ENSEÑANZA OBLIGATORIA Y ESTUDIOS ARTÍSTICOS
Según este diagnóstico, compatibilizar los estudios artísticos y la enseñanza obligatoria, resulta difícil para los estudiantes. Un alumno de 14 años que curse 3º de la ESO y 2º de Interpretación Musical soportará una carga curricular presencial de, al menos 33 horas. Además, su formación artística especializada solo le convalidará las asignaturas de Música y una optativa de ESO, es decir, cuatro horas lectivas.
En torno a 4.000 menores entre 6 y 14 años están matriculados en enseñanzas musicales, danza o plástica. La Escuela de Música Joaquín Maya ofrece nueve cursos a unos mil alumnos, a los que hay que sumar la red de más de 50 academias, en su mayoría de titularidad privada, que cuentan también con programas de actividades culturales.
El porcentaje de alumnos inscritos en estudios profesionales y superiores de música sancionados con titulaciones académicas supera en Navarra la media (1,88% frente al 1,36% de la proporción entre población regional y población nacional). A pesar de este dato, el número de matriculados en los dos conservatorios ha descendido un 12% entre el curso 2000/2001(934 inscritos) y el curso 2011/2012 (835 alumnos).
Navarra es una de las cuatro comunidades autónomas que no oferta ningún estudio reglado de danza y una de las siete que tampoco ofrece estudios de arte dramático.