Sanz cree que "grupos mandados por ETA" actuaron en Barañáin y pregunta al Gobierno "dónde tiene sus informes"

PAMPLONA, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, afirmó hoy que tiene en su poder "informes" que "pueden hacer ver que son grupos mandados por la propia dirección" de la organización terrorista ETA los que cometieron el ataque contra la ferretería del portavoz de UPN en Barañáin, y preguntó al Gobierno central "dónde tiene sus informes".

No obstante, Sanz, que acudió hoy a un acto público, indicó en declaraciones a los medios que le "da igual" que los autores de este ataque sean "agentes incontrolados por la banda terrorista ETA, porque eso no es lo importante". "Si son grupos incontrolados la obligación es controlarlos y, si son controlados, son controlados. En cualquier caso son terroristas", manifestó.

El presidente navarro señaló que él también tiene "servicios policiales" y que dispone de "información de que se ha intentado darle la consideración que menos perjudicase desde el punto de vista político a la estrategia del Partido Socialista" al ataque contra el comercio de José Antonio Mendive.

"¿En qué basa el Gobierno otro tipo de consideraciones que hacen con este ataque? ¿En que dicen que tienen informes? ¿Dónde tienen esos informes? Yo también tengo informes y servicios policiales. Y además, lo he visto in situ", apuntó.

A juicio de Miguel Sanz, "no existe ningún proceso de paz mientras existan acciones terroristas, por lo que no se puede solicitar autorización a las Cortes Generales para iniciar un proceso de negociación con ETA porque no se están garantizando las bases de una situación de no violencia".

Por otra parte, el jefe del Ejecutivo foral solicitó al secretario general del PSN, Carlos Chivite, "respeto" para sus declaraciones y criticó que el dirigente de los socialistas navarros "está cada día más despistado a la hora de hacer política". "Yo le aconsejo que se centre en sus planteamientos políticos, porque cada día le veo más radical, sobre todo cuando se dirige a mi persona", apuntó.

Así, pidió a Chivite "respeto", "por lo menos tanto como yo tengo cuando hablo del presidente Zapatero, a quien le he ofrecido toda la colaboración posible", pero, según indicó, "en ningún caso estoy dispuesto a aceptar algunos planteamientos que nunca se han aceptado cuando se ha hablado de terrorismo y al calificar atentados como el del otro día en la tienda del concejal de UPN".

Frente a que se trata de un hecho "puntual" el perpetrado en Barañáin, Sanz preguntó "cómo se valoraban ataques de similar intensidad antes del alto el fuego permanente". "¿Por qué antes los valoraban como atentados terroristas, incluso con menor intensidad que el de Barañáin, y ahora no quieren valorarles como tales? ¿Porque acaso se rompería la estrategia política en la que están inmersos para solicitar autorización en las Cortes Generales a fin de conseguir una situación ante la opinión pública de hacer ver que desaparece la violencia terrorista?".

Así, Sanz reprochó que en su caso "se llegue al insulto porque he dicho lo que pienso, lo que he dicho siempre sobre estos ataques". "¿A quién desestabilizan mis palabras? Como no sea a la propia estrategia del presidente Zapatero, yo no sé a quién desestabilizan", dijo el jefe del Ejecutivo.