PAMPLONA, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un total de 626 animales han sido recogidos en el Centro de Recuperación de Fauna Salvaje (CRFS) de Ilundáin en los diez primeros meses de 2009, igualando prácticamente la cifra de 632 animales ingresados en todo 2008, un aumento que se achaca a una mayor conciencia social, teniendo en cuenta que este año se han recibido más avisos de particulares que nunca en el 112.
La consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, Begoña Sanzberro, visitó esta mañana el Centro de Recuperación de Fauna Salvaje (CRFS) de Ilundáin, organismo que depende del citado departamento y que está dedicado, fundamentalmente, al tratamiento, cura y recuperación de aves silvestres, mamíferos y reptiles.
Durante el transcurso de la visita, fueron liberados dos animales. Por un lado, un erizo común, localizado en Marcilla el 24 de septiembre con una herida abierta en el lomo, que ha sido recuperado con tratamiento farmacológico. Una vez curado, se va a realizar su liberación antes de que comience su periodo de hibernación. Por otro lado, fue liberado un milano real, localizado el 12 de octubre en Gaztelu, que presentaba una fractura cerrada de cúbito de pronóstico muy grave en un primer momento. El animal fue vendado y sometido a tratamiento farmacológico.
Atendiendo a los datos de ingresos de animales en 2008, los meses de invierno fueron los de menor número de ingresos, mientras que entre junio, julio y agosto -época de cría y las primeras semanas de independencia para muchos jóvenes, lo que supone más vulnerabilidad porque ya no están bajo la protección de sus madres- se recogen más de la mitad de los animales de todo el año.
En cuanto a las clases de animales ingresados el año pasado, la inmensa mayoría son aves, la mitad de ellas, rapaces; muy por detrás están los ingresos de mamíferos (7,4%). Los reptiles, que siempre llegan al centro en número escaso, en esta campaña han supuesto el 4,5% de los ingresos.
Las especies más abundantes son el cernícalo vulgar, la cigüeña común, el buitre leonado y el autillo europeo. Completan la lista de las más representativas el busardo ratonero, el vencejo común y la lechuza común.
Si se analizan las causas por las que llegan los animales al Centro de Recuperación, se observa que muchos de ellos tienen en común el estar en una época temprana de su desarrollo. Otros llegan con traumas indeterminados, afectados de fracturas en alas, patas o en estado de shock.
Existe un 8% de ingresos por disparo o atropello. Los animales procedentes de cautividad suponen un 3% del total, y los que llegan débiles representan un 10%. Finalmente, son numerosas las ocasiones en que, o bien no se llega a saber la causa, o bien ésta es muy minoritaria dentro del número total de ingresos (11%).
MÁS DEL 55%, LIBERADOS
De los 632 animales ingresados en 2008, más de la mitad, un 55%, pudieron ser liberados una vez recuperados de sus lesiones; un 35% murieron o tuvieron que ser sacrificados para evitar su sufrimiento debido a la gravedad de sus heridas, y un 5% fueron cedidos a programas de sensibilización o para ser cuidados por particulares por tratarse, fundamentalmente, de mascotas abandonadas.
Además de la tarea de recuperación de fauna salvaje, para lo que se cuenta con la colaboración de los guardas del Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente y la ciudadanía en general, el CRFS también se dedica a evitar sufrimientos innecesarios a la fauna (por ejemplo, proporcionando una muerte digna a los animales heridos que no tienen posibilidad de recuperación), así como a evitar la contaminación del hábitat con fauna exótica.
Otra de sus labores consiste en concienciar a la sociedad de la importancia del respeto a los animales. Para ello, organizan diversas actividades tales como sueltas de animales recuperados en público, charlas o exposiciones como la llamada 'Sentir como animales', que ha recorrido ya varios municipios de Navarra.
Además, el propio centro recibe alrededor de 1.000 visitas anuales y su acción se utiliza como herramienta didáctica en los centros educativos (en 2008 participaron alrededor de 700 escolares en sus actividades).
El Centro de Recuperación trabaja las 24 horas y todos los días del año sin excepción. En caso de encontrar un animal salvaje que por cualquier circunstancia no puede valerse por si mismo, basta con llamar al 112; tras el aviso, técnicos cualificados se pondrán en contacto con el particular a fin de localizar al animal y recogerlo con la mayor brevedad posible.
RED DE VOLUNTARIADO
El centro cuenta además, con una Red de Voluntariado que participa en la vigilancia y mantenimiento de nidos artificiales colocados en el campo, en el cuidado de crías y polluelos huérfanos de ciertas especies y en la recogida de animales heridos.
Por otro lado, el CRFS también realiza labores de investigación. Así, con el fin de conocer la capacidad de supervivencia de los animales liberados y poder evaluar la eficacia de las técnicas y protocolos de rehabilitación utilizados, existe un determinado número de animales que se marca con transmisor para su posterior radioseguimiento, obteniendo resultados positivos en el 50% de los casos.
Por ejemplo, uno de los animales marcados, un autillo liberado en el parque de la Media Luna de Pamplona, fue localizado en Cádiz dos meses después; es la primera vez que se localiza una rapaz nocturna en migración con técnicas de radioseguimiento, lo que supone todo un éxito en los trabajos de recuperación de esta especie, según los técnicos.
El centro de Ilundáin tiene un coste anual de 180.000 euros, a los que hay que sumar el servicio 24 horas de emergencias ambientales a través del 112, con un coste de 37.000 euros.