Actualizado 24/11/2007 01:00

Andrés Aberasturi.- Están ensimismados

MADRID 24 Nov. (OTR/PRESS) -

Sólo en una sociedad muy frívola -o muy adormilada- puede darse una clase política tan cegata, tan corta, tan ensimismada en el peor sentido y el más auténtico, de la palabra. El CIS hace públicos los resultados de su ritual encuesta y los dos grandes partidos se aferran al clavo ardiente de los datos que mejor les vienen; sólo se preocupan de ellos, sólo ellos cuentan, sólo las décimas que les afectan directamente parecen preocuparles. Resulta sorprendente que tanto el PSOE y el PP, preguntados por la encuesta, valoren positivamente las cifras y desaprovechen la oportunidad que se les ofrece de hacer un comentario realmente "político" (que triste tener que entrecomillar la palabra para intentar así darle su verdadera dimensión).

Porque el resultado de la encuesta del CIS es globalmente demoledor o al menos muy poco optimista. De entrada llama la atención que en el muestreo, realizado entre el 22 y el 29 de octubre, ningún líder político logra siquiera el aprobado. La sociedad encuestada suspende claramente a todos los líderes, desde Zapatero a Llamazares y aun más a Rajoy. Pero si eso no les llama la atención a los políticos, solo tendrían que bajar una líneas para encontrarse con la sensación que tienen los españoles sobre la situación económica: el 38,4% juzga que la economía española está hoy peor que hace doce meses y que el 33,5% augura que continuará empeorando el año que viene. Y eso que aun no hemos llegado a las siempre carísimas navidades en las que la subida de los precios va a ser aun mayor que la actual -que ya es decir- y sólo nos queda la leve esperanza de que después, la cesta de la compra baje un poco. Pero de eso no hablan los políticos; tampoco de que el paro, pese al triunfalismo de los videos del Gobierno, sea otra vez lo que más preocupa a los españoles y luego aparezca la vivienda pese a los datos no menos triunfalistas de todas las autonomías y en tercer lugar la emigración en un país que se empeña en que no es racista y con unos representantes institucionales y unos medios de comunicación que, para ser "correctos", nunca entran a fondo y de verdad en los problemas reales -los datos están ahí- que origina una inmigración desbaratada y unas leyes incapaces de afrontar esta nueva realidad.

Pues todo esto, y mucho más, no es materia analizable para los políticos, estos datos y lo que esconden o exponen, no parece que le preocupe mucho. Sólo se detienen en si sube la intención de voto (caso del PP) o si siguen teniendo mayoría (caso del PSOE). No se trata de dar lecciones a nadie, pero escuchaba a Acebes contestar a la pregunta de siempre: ¿qué le parece el último barómetro del CIS? Y su respuesta fue tan triste como previsible: le parecía muy bien porque el PP subía. Qué oportunidad para decir que los datos le habían hecho polvo, que el PP tendría que reflexionar y que el Gobierno debería leer la letra pequeña, como él había hecho, en lugar de fijarse en la intención de voto, que aquí se esta para servir y no para servirse etc. Pues no; dijo lo que se esperaba que dijera, que su partido subía, que había un empate técnico, que* lo de siempre. Y el PSOE igual pero desde el otro lado. No sólo están ensimismados, es que no tienen un gramo de imaginación y eso más pronto que tarde, pasa factura.

Andrés Aberasturi.

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