MADRID 21 Ene. (OTR/PRESS) -
La bolsa española sigue imparable. Y esto no se nota únicamente en los índices, también en el volumen de contratación. El viernes se marcó un nuevo récord y el IBEX se acercó a los 14.400 puntos, tras una subida de casi un 1 por ciento. La semana estuvo en conjunto más floja, al cerrarse con un alza del selectivo de apenas 0,20 por ciento. Los buenos datos sobre la evolución de la economía norteamericana y las expectativas para el futuro de ese mismo país hicieron junto al las constructoras que el último día de la semana se olvidaran los inversores de que había vencimiento de opciones y futuros.
Hay que anotar la espectacular subida de las acciones de Sacyr, que sumaron casi un 12 por ciento, sin que se explique muy bien, ya que no se produjo ninguna noticia que afectara al valor. Sí, en cambio, se entiende que los títulos de Gas Natural anden de capa caída. El presidente de Repsol, a la vista de que ya se acerca la hora de la verdad, una vez que el camino judicial ha quedado despejado, vino a decir que la gasista no puede llegar ni de lejos a la oferta de E.On. El mercado interpreta que Gas Natural-La Caixa tiran definitivamente la toalla en su operación de asalto a Endesa. La eléctrica presidida por Pizarro, por su parte, ha logrado varios récord de cotización esta semana y en algún momento ha llegado a los 38 euros. De ahí que algunas casas de inversión apuesten porque fácilmente podemos ver las acciones de la eléctrica a 40 euros. La operación por Endesa ha iniciado la cuenta atrás y eso a pesar de que el Gobierno sigue insistiendo en llevar la contraria a la Comisión Europea. Ayer el ejecutivo se negó de nuevo a cambiar las condiciones impuestas a E.On por la CNE y Bruselas amenazó con llevar a España ante los tribunales. En todo caso, no parece que estas escaramuzas de última hora logren evitar que ahora las ofertas salgan a la luz y realmente los accionistas de Endesa puedan decidir.
Carmen Tomás