MADRID 4 Oct. (OTR/PRESS) -
Dentro del conjunto de disparates en que Artur Mas y ERC han convertido el tablero político en Cataluña merced a su órdago soberanista, faltaba un elemento mas que añadir y que atañe al líder de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegui, preso actualmente en la cárcel de Logroño por un delito de colaboración con ETA. Aunque en la actualidad, lo castizo se lleva poco en Cataluña, es como para recordar el dicho popular de "éramos pocos y parió la abuela".
Resulta que la CUP, el grupo de extrema izquierda radical que consiguió representación en el Parlamento de Cataluña en las últimas elecciones autonómicas, ha propuesto a Otegui como uno de los "expertos" que asesore a la comisión que en el seno de la Cámara Legislativa catalana se ha creado para estudiar el derecho a decidir. Pero como existe el "pequeño" inconveniente de que el líder de la izquierda abertzale está preso y eso impide su presencia física en Barcelona, se ha decidido que mande su opinión por escrito. Esta propuesta de la CUP ha sido apoyada por CiU, ERC y en cuanto al PSC, como últimamente pasa con este partido, no se aclaran: en un principio no se opusieron, y a raíz del follón que se ha armado, ahora piden que se prescinda de la opinión de Otegui .
Todo esto resultaría cómico si no estuviéramos hablando de un hecho que afecta a alguien que ha sido condenado por un delito de colaboración con banda armada. Una banda, ETA, que ha causado mucho dolor a lo largo de su macabra existencia en toda España, también en Cataluña, Baste recordar el atentado contra los almacenes de Hipercor en Barcelona, el 19 de junio de 1987, donde murieron veintiuna personas. La falta de escrúpulos y de cualquier tipo de principios morales o éticos que supone el plantearse contar con la opinión de individuos como Otegui, lo único que pone de manifiesto es la pérdida de cualquier norte, en partidos que se dicen democráticos, como es el caso de CIU.
En el caso de la Esquerra Republicana, la cuestión de apoyar a Otegui se puede entender mejor ya que solo hay que recordar que en enero de 2004, el entonces líder de ERC y vicepresidente de la Generalitat de Cataluña, Josep Lluis Carod Rovira, se reunión en Perpignan con la cúpula de ETA y de ese encuentro salió el acuerdo de que la banda terrorista se comprometía a declarar una tregua sólo para Cataluña y a cambio ERC se convertía en la vanguardia del movimiento independentista vasco, impulsando el proceso secesionista en Cataluña al que seguiría el de Euskadi. Eso fue en el 2004. Nueve años mas tarde, se puede decir que ERC ha hecho muy bien sus deberes: Cataluña está mas cerca de la independencia; el País Vasco espera y de Otegui, en la cárcel, quieren su opinión como "experto".