Actualizado 28/03/2007 20:42

Crónica Batasuna (2).- Zapatero asegura que no dio órdenes al fiscal para que retirase la acusación contra Otegi

- Rajoy dice fue el Ejecutivo el que "no quiso que fuera a la cárcel igual que quiso que De Juana saliera a la calle"

MADRID, 28 Mar. (OTR/PRESS) -

El líder de Batasuna Arnaldo Otegi se convirtió en el protagonista de la sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso de los Diputados. El líder del PP, Mariano Rajoy, preguntó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero por la actuación del fiscal en el juicio que se celebró la semana pasada contra el dirigente abertzale y afirmó que el jefe del Ejecutivo el que "no quiso que fuera a la cárcel, igual que quiso que De Juana saliera a la calle". Unas acusaciones que fueron rebatidas por Zapatero que aseguró que es "falso y mentira" que desde el Gobierno se diera ningún tipo de instrucciones a la Fiscalía en relación con el caso Otegi y retó a Rajoy a probar este extremo.

Por la mañana, diputados de todos los grupos mantuvieron un minuto de silencio en la escalinata de la puerta de Los Leones del Congreso en memoria de Ambrosio Fernández, muerto tras las lesiones producidas en un reciente, acto de kale borroka en Mondragón (Guipúzcoa). Por la tarde, en el pleno, Rajoy comenzó el que sería su enésimo enfrentamiento con Zapatero en sede parlamentaria a cuenta de la política antiterrorista del Gobierno recordando los antecedentes del caso Otegi, como ya fue condenado por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) a 15 meses de cárcel por un delito de enaltecimiento del terrorismo durante el homenaje a la etarra Olaia Castresana y como esa sentencia fue anulada por el Supremo.

A partir de ese punto Rajoy arremetió contra la actuación de la Fiscalía que "hizo todo lo posible para que el juicio no se celebrara", retiró la acusación "después de que el señor Otegi no compareciera en la Audiencia y tuvieran que ir a buscarlo en un avión pagado por los contribuyentes" y luego en la vista realizó una intervención tan a favor del líder de Batasuna que su abogada "ni siquiera tuvo que intervenir" ante el tribunal.

"A quién le corresponde mantener una acusación es al fiscal, ni a usted ni a mí", replicó Zapatero que en todo momento quiso desvincularse de la decisión adoptada por la Fiscalía. En este sentido señaló que "la mejor manera de contribuir al funcionamiento del estado de derecho es respetar la decisión de fiscales y tribunales que actúan conforme a su leal entender" y destacó que en este caso se trata de uno con gran experiencia, como es el fiscal Fernando Burgos.

ZAPATERO DEFIENDE "EL INTERÉS DE OTEGI"

En su contrarréplica, Rajoy quiso puntualizar que la diferencia entre él y el presidente del Gobierno es que "yo no tengo ninguna relación con el fiscal y usted sí puede interesarle a promover acciones". Acto seguido señaló que la actuación de la Fiscalía en el caso Otegi "ha sido lamentable" al que se le ha dado "un trato de favor". "Usted no quiso que fuera a la cárcel igual que quiso que De Juana saliera a la calle", proclamó Rajoy, que volvió a dirigirse a Zapatero para acusarle de no defender el interés general sino "otro, que es el del señor Otegi".

"Lamento tener que decirle que el Gobierno no ha dado ninguna instrucción ni se ha interesado por el procedimiento al que hace referencia", espetó Zapatero que aseguró que el Gobierno respeta "la actuación del Ministerio Fiscal, de todos los fiscales". Apeló a la responsabilidad de Rajoy para no hacer dudar de la "honestidad" en el comportamiento de un fiscal "de larga trayectoria", a no ser que "en su experiencia de gobierno pasaran cosas diferentes con la Fiscalía General del Estado". Y para terminar quiso dejar claro que "es falso y mentira" que el Gobierno haya interesado alguna actuación del fiscal y "como las cosas en política son así, o demuestra que esto es así, o es falso".

En este punto, los ánimos se calentaron en el hemiciclo y el presidente del Congreso, Manuel Marín tuvo que hacer un llamamiento a la tranquilidad, concretamente al diputado popular Jorge Moragas. "Le ruego que cese en su actitud. Aquí se viene a debatir y a escuchar", le reprendió Marín. Luego fue la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, la que tuvo que aguantar los envites de los otros dos primeros espadas populares.

EL "VERDADERO" PROGRAMA SOCIALISTA

El secretario general del PP, Ángel Acebes, recordó lo que decía el programa electoral del PSOE en materia antiterrorista y señaló lo que, a su juicio, debería decir que para no faltar a la verdad: "nos comprometemos a romper el Pacto Antiterrorista, a emprender una negociación con ETA y a que ese proceso se mantendrá aunque haya kale borroka, extorsiones o incluso bombas, llevaremos el conflicto a Europa como quiere ETA, no compareceremos ante el Congreso, cederemos al chantaje de De Juana, retiraremos las acusaciones contra Otegi y provocaremos la indignación de la mayoría de víctimas". "Prometieron una cosa en su programa y han hecho exactamente lo contrario", denunció.

En su respuesta De la Vega aseguró que el Gobierno "cumple todos sus compromisos con los ciudadanos" y comenzó haciéndolo "desde el minuto cero" retirando las tropas de Irak y aprobando la ley de contra la Violencia de Género. "Y desde el primer día hemos luchado contra el terrorismo con la ley en la mano y promoviendo la unidad que ustedes rompieron", afirmó la vicepresidenta que además señaló que trabajar para alcanzar la paz "es más que un compromiso un deber" tanto de Gobierno como de oposición con el que el PP no está cumpliendo.

En este punto Acebes no dudó, en su escueta contrarréplica en sacar el ya famoso precio del café según Zapatero. "Se puede poner como quiera, pero los españoles no les votaron para hacer lo que han hecho en materia de terrorismo ni el café vale 80 céntimos", espetó. El enfrentamiento entre De la Vega y Acebes levantó pasiones en las bancadas populares y socialistas lo que llevó a Marín a interrumpir la sesión bajo la amenaza de suspensión. "O el ambiente se calma o tendré que suspender la sesión. No podemos seguir así", se lamentó el presidente de la Cámara Baja que recordó que en su época de parlamentario "nunca" se le ocurrió "venir al hemiciclo a gritar".

CONDE-PUMPIDO, EL MAYOR DEFENSOR DE BATASUNA

Por su parte el portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, le preguntó si el Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido está actuando en defensa de la legalidad, como exige la Constitución, a lo que de la Vega contestó: "el fiscal cumple con la legalidad en interés de los ciudadanos como dice la Constitución, ¡a ver si se la mira señor Zaplana!".

Un Zaplana que, en su contestación, acusó a Conde-Pumpido de haberse convertido "en el mayor defensor de Batasuna", e hizo un repaso por sus últimas decisiones, rebajando sus peticiones de condena como en caso de Iñaki Bilbao o la petición de archivo del caso Egunkaria, además del ya archifamoso caso De Juana. "El calendario del Fiscal General es el calendario de la infamia", proclamó.

"Su desmesura es tal que ya no hay quién le crea", replicó la vicepresidenta que pidió al PP que no cofunda "la legalidad con la conveniencia de sus intereses de partido" e insistió en que sería durante los gobiernos del PP cuando el Ejecutivo daba órdenes a la Fiscalía, algo "que ahora no pasa".

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