- La Audiencia Nacional también le prohíbe acercarse al domicilio donde resida su víctima durante diez años
MADRID, 1 Dic. (OTR/PRESS) -
Otra condena para otro histórico de ETA. La Audiencia Nacional condenó hoy a 18 años de cárcel al etarra Juan Carlos Iglesias Chouzas, alias 'Gadafi', por tirotear a un hombre en 1991 en la localidad vizcaína de Barrika. 'Gadafi' creía que su víctima, al que no alcanzaron los disparos, era miembro del Cuerpo Nacional de Policía. En su sentencia el tribunal también prohíbe al etarra acercarse al domicilio en el que resida el tiroteado en el plazo de diez años.
El tribunal, que integran los magistrados Fernando García Nicolás, Fernando Grande-Marlaska y Ricardo Rodríguez, condena también a "Gadafi" por asesinato frustrado, si bien advierte que lo hace por aplicación del principio acusatorio que representa el Ministerio Público. La Sala cree que los hechos deberían considerarse como un delito de atentado, que conlleva una pena más grave, puesto que el terrorista creía erróneamente que disparó contra un policía, siendo precisamente esta circunstancia la que determinó la elección de su objetivo.
En su sentencia, la Sección Segunda de lo penal de la Audiencia Nacional considera probado que 'Gadafi' integraba el 'Comando Vizcaya' junto con Javier Martínez Izaguirre, que ya fue condenado por estos hechos. La dirección de ETA les informó sobre un objetivo, un policía que se iba a trasladar hasta su casa de fin de semana situada en Barrika.
El 15 de diciembre de 1991 los terroristas subieron a un taxi en Algorta para llegar hasta Urduliz y durante el camino se identificaron como miembros de ETA y ordenaron al conductor que se dirigiera al depósito de agua de Gohierri. Allí le sacaron del coche y le maniataron con cadenas.
"CARNICERO DE TODA LA VIDA"
Ya con un coche a su disposición, los dos etarras fueron a la urbanización donde estaba la vivienda del supuesto policía. Esperaron y cuando una persona salió a la terraza de la misma efectuaron al menos dos disparos. Pero no se trataba del Policía, sino de el dueño del piso, amigo del agente, "carnicero de toda la vida".
Por estos hechos, el fiscal Juan Moral pidió una condena de 24 años de prisión para el ex dirigente etarra por asesinato y robo con rehenes, si bien la Sala entiende que este último hecho (referido a la retención del taxista hasta el momento de ser abandonado junto al depósito de agua) debe ser calificado como un delito de utilización ilegítima de vehículo de motor en concurso con otro de detención ilegal.