- Tras la agresión, el imputado creyó que había alcanzado la inmortalidad y estrelló su coche contra varios vehículos estacionados
MADRID, 10 Feb. (OTR/PRESS) -
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a seis años de internamiento en un centro psiquiátrico a un joven que, en pleno brote psicótico, asestó cuatro puñaladas a su madre convencido como estaba de que su progenitora era el mismísimo diablo. Tras consumar la agresión, el procesado creyó que había alcanzado la inmortalidad y, para demostrárselo a sí mismo, salió a la calle, cogió el coche y lo estrelló contra varios vehículos estacionados en los que, afortunadamente, no había nadie.
En su sentencia, la Audiencia Provincial de Madrid relata los hechos, que se desarrollaron el 9 de febrero de 2006, cuando el joven procesado y su madre se encontraban en casa. Mientras la mujer se encontraba durmiendo, su hijo "con las facultades cognitivas y volitivas completamente anuladas como consecuencia de un brote psicótico" se convenció a sí mismo de que en realidad su progenitora era el diablo y de que debía acabar con él para proteger su vida.
Así, el joven se dirigió a la cocina, cogió un cuchillo y asestó cuatro puñaladas a su madre, que quedó herida de gravedad tendida en la cama. Mientras, el hijo, creyendo haber acabado con la vida del diablo en que se había convertido su progenitora, imaginó que tal acto le había proporcionado la inmortalidad, por lo que salió a la calle para comprobar que, pasara lo que pasara, su nuevo estatus le proporcionaría seguridad.
Con esas tribulaciones, el joven cogió el coche, lo arrancó y lo dirigió directamente contra otros vehículos estacionados en la calle, en los que, afortunadamente, no había nadie en ese momento. A los pocos minutos, una patrulla de la Policía acudió al lugar del accidente alertada por algún vecino de la zona y el procesado contó a los agentes todo lo ocurrido, su peripecia con el diablo en casa y la inmortalidad alcanzada gracias a su proeza.
CONSECUENCIAS DE UN BROTE
Para dictar la sentencia, los jueces de la Audiencia Nacional de Madrid tuvieron en cuenta el informe de los psiquiatras, que concluyó que, en el momento de los hechos, "el imputado actuaba bajos los efectos de un brote psicótico agudo que condicionó por completo sus facultades cognitivas, de tal modo que no podía distinguir la realidad del delirio, y, en concreto, a su madre del diablo".
Antes de su declaración en el juicio, el Ministerio Fiscal consideró los hechos como constitutivos de un delito de asesinato en grado de tentativa, por lo que pedía seis años de prisión. Sin embargo, después de escuchar las declaraciones del joven en la vista oral y teniendo en cuenta la eximente completa de la anomalía psíquica, el tribunal rebajó la pena a seis años de internamiento psiquiátrico.
Como consecuencia del apuñalamiento por parte de su hijo de la que fue víctima la mujer, debió permanecer ingresada durante cinco días en el Hospital en estado de gravedad y sus heridas tardaron 98 días en curarse por completo.