- Los tres mandos se enfrentan a una pena que oscila entre uno y seis años de cárcel
MADRID, 12 Nov. (OTR/PRESS) -
La Fiscalía acusa de falsedad documental a los mandos militares responsables de la identificación de los 62 soldados españoles que fallecieron en el accidente del Yakovlev-42 en mayo de 2003. Los acusados por el Ministerio Público en el escrito presentado hoy ante el magistrado de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska son el general de Sanidad Vicente Navarro, quien se encargó de elaborar la lista de los 62 fallecidos, y los dos oficiales médicos que le apoyaron en la identificación, el comandante médico José Ramírez y el capitán médico José Saéz. Una identificación bochornosa que se realizó de forma errónea en todos y cada uno de los casos y por la que los tres se enfrentan a una pena que oscila entre uno y seis años de cárcel.
El accidente más grave de la historia del Ejército español tuvo lugar la madrugada del 26 de mayo de 2003, en Trabzon (Turquía). Un total de 62 militares españoles que regresaban de Afganistán perdieron la vida en la que fue la mayor catástrofe de las tropas españolas en tiempo de paz. Hasta el lugar de los hechos se desplazó un equipo de especialistas en identificación de cadáveres para identificar los restos de los fallecidos capitaneado por el general de Sanidad Vicente Navarro.
Su labor, realizada en un tiempo récord, no fue muy exhaustiva según subraya el fiscal en su escrito. Tan sólo fueron identificados de manera acertada 32 de los muertos a partir de elementos externos como zonas del cuerpo no quemadas o restos de uniforme. No obstante, la identificación del resto de los tripulantes del aparato accidentado fue establecida de manera aleatoria por el general Navarro, quien erró en todos los casos al otorgar una identidad a cada féretro sin practicarse las autopsias ni pruebas de ADN.
Pese a ello, ésta fue la referencia utilizada a la hora de entregar los cadáveres las familias y de realizar los informes de necropsias, a partir de los cuales, muchas familias procedieron a la incineración de algunos militares sin la autorización de sus verdaderos parientes.
DELITO CONTINUADO
Una conducta que el Ministerio Público entiende que podría ser constitutiva de un delito continuado de falsedad documental en el que incurrieron los tres oficiales cuando procedieron a la identificación, errónea en todos los casos, de los soldados fallecidos. Ahora el juez deberá decidir si pone fin al periodo de diligencias previas o si abre juicio oral contra los tres acusados por el Ministerio Público.
Recientemente la Sala de lo Penal rechazó en recurso de apelación todas las pruebas solicitadas por la familia en referencia a este caso. Asimismo, el pasado 1 de junio el juez Grande-Marlaska decidió archivar lo referente a la contratación del aparato accidentado. Además en la Audiencia Provincial de Zaragoza se sigue el procedimiento civil contra las compañías contratistas de Yakovlev.