Actualizado 14/09/2007 02:00

Francisco Muro de Iscar.- Fuera, a la intemperie

MADRID 14 Sep. (OTR/PRESS) - La política se hace en España en, por, para, desde y hacia los partidos políticos. Habrá quien diga que es desde la sociedad y hacia los ciudadanos, pero no se lo cree nadie. Si extremamos un poco la afirmación, la política se hace en los aparatos de los partidos y nada más: una decena de personas a nivel nacional, y, luego, poderes repartidos en lo regional o local, también pequeños núcleos, que hacen y deshacen a su antojo en Ministerios, Ayuntamientos, comunidades autónomas, etc. El partido, del color que sea, tiene el poder: hace y deshace las listas electorales -eso es el poder- y reparte y quita los cargos. O estás con los que mandan, o no estás.

¿Ejemplos? Rosa Díez o Josu Jon Imaz. Incluso, Pedro Solbes o el de la ministra Elena Salgado, que tiene tantas posibilidades de ir en las próximas listas electorales como usted. Lo malo es que fuera de los partidos se está a la intemperie. Ciutadans tiene un presente de cierta importancia mediática, escasa relevancia real y un futuro previsible en la marginalidad hasta su desaparición. Algo parecido le puede pasar a la incansable y heroica Rosa Díez. Josu Jon Imaz ha tirado la toalla porque el aparato de su partido, no las bases ni los ciudadanos, se la había jurado. No se puede uno enfrentar con los que tienen el poder, aunque ese poder no haya pasado nunca por unas elecciones, como era el caso de Arzallus, que en gloria -política, claro- esté.

Solbes es un caso perdido. Un hombre honesto, un excelente ministro, una persona de bien que está tragando quina en su intento por hacer que las cuentas del Estado no se conviertan en un disparate en un Gobierno que empieza a parecer el camarote de los Hermanos Marx. Al grito de "¡más madera!", desde el presidente hasta casi el último de los ministros está lanzando promesas que cuestan dinero sin que ninguno -Solbes es la excepción-, mire si hay dinero y si es oportuno gastarlo. Solbes está de vuelta y no parece que le importe. Pero le acaban de pegar un varapalo que, a cualquiera le llevaría a la dimisión. La ministra Elena Salgado ha dicho que a ella nunca le tumbaron en sanidad una propuesta que se hubiera presentado adecuadamente. Y Bernat Soria, el inductor de la atención bucosanitaria, siguiendo a la vicepresidenta, le ha dicho a Solbes lo mismo que Carmen Chacón, en el asunto de la vivienda: "no te enteras".

Y en esas estamos cuando sale Caldera, siguiendo al pie de la letra las consignas de López Garrido y ambos las de Maria Teresa Fernández de la Vega: "Este gobierno es transparente". Lo que pasa es que, a veces, la transparencia permite ver lo que hay. Aunque se mire desde fuera, desde la intemperie, desde la más absoluta soledad que es lo que se va a encontrar ahora Josu Jon Imaz por haberse atrevido a desafiar al aparato. Habremos ganado un buen profesional liberal para la sociedad y perdido un político que no está dispuesto a aceptarlo todo al precio que sea.

Francisco Muro de Iscar

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