MADRID 24 Nov. (OTR/PRESS) -
Las declaraciones y proclamas "soberanistas" del dirigente de Convergencia Democrática de Cataluña Artur Mas esta misma semana, ante un grupo nutrido de empresarios catalanes, dejaron un sabor de boca amargo o ácido, según los casos. Hasta el punto de que tanto él mismo como su socio de coalición Durán y Lleida, líder de Unió Democrática de Cataluña, se han visto en la necesidad de refrendar en algún caso, o de, en todo caso, salir al paso a algunas interpretaciones que consideran inadecuadas o inoportunas. Pero tampoco han sido declaraciones que hayan pasado por alto otros partidos catalanes rivales. Por ejemplo, los socialistas del PSC han acusado "la ambigüedad de Mas", y consideran abstractas las propuestas del líder convergente. El dirigente del PSC y portavoz del partido, Miquel Iceta, ha declarado que Cataluña no se reafirma enfrentándose a España, y observa que CiU "abraza la radicalidad y se aleja de los postulados de Jordi Pujol".
Por su parte, Durán o Lleida, en declaraciones efectuadas en Madrid. Ha insistido en que "no procede" romper con España, y proclama que "el derecho a decidir no está vinculado a la independencia". Ha hecho otras declaraciones no menos interesante: Por ejemplo, que el compromiso notarial de Artur Mas de no pactar con el PP ya no está vigente. Según interpreta el diario ABC, José Antonio Durán "rebaja el proyecto de Mas y abre CiU a pactos electorales, y circunscribe las palabras de su socio de coalición a un debate conceptual". Ya es sabido lo que suele asegurarse: que los nacionalistas, vascos o catalanes, tienen dos criterios distintos para sus declaraciones, según las digan en su propia tierra o en la capital española... En esta última plaza suelen resultar más moderadas y menos beligerantes.
Sin embargo, no parece atenido a esta regla general Artur Mas, quien, en declaraciones a Los Desayunos de TVE, este mismo jueves, se refería a la gran cuestión pendiente: qué hará el Tribunal Constitucional sobre el Estatuto catalán, ahora mismo en sus manos. Artur Más ha afirmado que el Tribunal Constitucional se encuentra desprestigiado por sus batallas internas, por lo que no está legitimado para emitir una sentencia tan importante como la que afecta al estatut. Artur Mas, en efecto, puso en duda que el TC pueda juzgar algo seriamente, dado el espectáculo permanente y su evidente mediatización política. Y añadió que el Constitucional es libre de dictaminar la sentencia que quiera, pero advirtió que Cataluña también es libre de aceptarla...
En otras declaraciones al diario ADN, sorprende Mas con su solicitud: Es hora de que los españoles nos echen una mano". De su proyecto soberanista, dice Mas que no es una radicalización, sino hablar claro y proponer a los catalanes "que si seguimos haciendo lo mismo, no defenderemos nuestros derechos". Dice también que su confianza en el gobierno de Zapatero es prácticamente cero, que CiU ha pasado 30 años defendiendo el interés general español... Y que no le da miedo hablar de independencia, aunque hacerlo ahora sería dividir a la sociedad catalana. Durán tendrá que volver a matizar y rebajar...
José Cavero.