MADRID 3 Mar. (OTR/PRESS) -
Olvidado el juicio oral en el que se relata con detalle cuánto y quiénes programaron y perpetraron el atentado de Atocha de aún no hace tres años, y mientras se termina el edificio homenaje a las víctimas de aquella masacre, las atenciones siguen colocadas en un etarra que hace veinte años dirigió el sangriento Comando Madrid y causó la muerte a veinticinco ciudadanos, muchos de rostro desconocido o ya difuminados, y otros como Sáenz de Ynestrillas o Fausto Escrigas, aún muy vivos en el recuerdo y en las hemerotecas. Este De Juana Chaos habrá pasado ya a la historia por varias razones. Por su crueldad bien demostrada, por supuesto. Pero también será estudiado su caso por las sucesivas incoherencias y atrocidades demostradas con él y con su caso por la Administración de Justicia: Condenado a más de tres mil años de prisión, su buena conducta carcelaria reduce a 18 años el tiempo de encarcelamiento. Y cuando se aproxima el momento de verlo libre, hay un gran clamor y alarma social: ¿Cómo es posible que este peligrosísimo criminal recupere la libertad? Y se recurre a unos artículos que ha publicado en el diario Gara, para enjuiciarle nuevamente y poderlo, así, retener en prisión unos cuantos años más. El tribunal "duda" entre condenarlo a casi cien años y finalmente lo sentencia a doce años de prisión, por esos artículos en los que halla amenazas y enaltecimiento del terrorismo. De Juana reacciona: después de haber soñado con estar ya en libertad, todo le parece una farsa insoportable y recurre al tribunal y a la huelga de hambre. El recurso ante el Supremo reduce su nueva pena a sólo tres años, de los que ya ha cumplido la mitad. Su recurso a la huelga lo sitúa en serio riesgo de muerte.
Y en ese punto actúa el gobierno, presionado por las multitudes que la AVT-PP saca a la calle para impedir su puesta en libertad o atenuación de estado penitenciario, de una parte, presionado por un recluso que se niega a tomar alimentos, incluso por sonda, y presionado por los abertzales y proetarras que amenazan con adoptar sus propias medidas posiblemente violentas... Excluido el PP, los restantes partidos políticos apoyan la decisión del gobierno. En este clima, Rubalcaba asume la decisión de desplazar a De Juana desde el Hospital de Madrid a un hospital de San Sebastián, en el que De Juana entra por su propio pie y donde recibe la felicitación personal de Arnaldo Otegi y otros dirigentes de Batasuna. El gobierno insiste en que los informes médicos eran muy concluyentes y hablaban de que, de persistir en su actitud, tenía riesgo inminente de muerte en unas pocas semanas, y riesgo aún más claro de padecer secuelas insuperables.
¿Qué sucederá ahora? Cabe esperar que se irán tranquilizando las muy revueltas aguas de las reacciones: de una parte, la de la oposición de AVT-PP, Foro de Ermua y quienes salieron a la calle en la tarde-noche del jueves para protestar contra la decisión del gobierno, y que no dudaron en reclamar la dimisión de Zapatero y Rubalcaba y de insultarles como traidores. Volverán a la calle para expresar de nuevo su radical desacuerdo. Las otras aguas que cabe esperar que se amainen son las abertzales y sus celebraciones del héroe y mártir recuperado para la causa, un etarra llamado Iñaki De Juana Chaos a quien ya e ve tomando chiquitos dentro de poco tiempo en las herrikotabernas el barrio viejo de San Sebastián... Pero aún quedan muchos capítulos más del Caso De Juana.
José Cavero.