Actualizado 14/05/2007 02:00

José Cavero.- La confusa situación vasca

MADRID 14 May. (OTR/PRESS) -

Nuevamente, en este comienzo de la campaña electoral municipal, la situación política en Euskadi adolece de toda suerte de incertidumbres y contradicciones y confusiones posibles. De una parte, los Batasunos, por boca de Otegi, han expresado su malestar por la "criba" de que fueron objeto por parte de la fiscalía y los tribunales, sus listas de ANV, infestadas y plagadas de Batasunos. Al mismo tiempo que protestan, los dirigentes batasunos instan a sus bases y militancias a que se sumen a votar a esas listas en las que se refugian los ilegalizados proetarras. Pero, de manera sorprendente Otegi ha vinculado esos recortes a sus listas de ANV a un proceso de paz que Batasuna pretende que sigue vivo, pese al bestial atentado de Barajas con dos muertes. Según Otegi, el gobierno socialista y el PNV habrían dado un portazo a la posibilidad de que exista ese proceso de soluciones políticas al conflicto, que según Batasuna y ETA debiera ser en una sola dirección: con la cesión permanente de los demócratas y para beneficio exclusivo de los totalitarios abertzales radicales.

Porque, ésa es otra, así las cosas, los radicales han recuperado la violencia callejera, acaso para expresar que no todo está sucediendo a su gusto y según su calendario ante lo cual, parece que también empiezan a producirse cambios en la estrategia del campo democrático. De una parte, las llamativas declaraciones efectuadas por el fiscal general del Estado: "Cándido Conde Pumpido advierte o anuncia que es posible la suspensión de ANV antes del 27-M". Dice el superfiscal que si los dirigentes de Batasuna manifiestan que ANV es su opción, este comportamiento podría ser un indicio adicional para su futura ilegalización. Y parece evidente que Batasuna "ha tomado posesión" de ANV y la dirige y emplea a su provecho exclusivo y sin disimulo alguno. De otra parte, la iniciativa del PNV, de promover un nuevo pacto antiterrorista a Zapatero y Rajoy, ante la amenaza de ETA. Esta iniciativa rechaza negociar el futuro del País Vasco con la banda. Juan José Imaz, presidente del PNV, estaría dispuesto a ser el mediador entre PP y PSOE si ambos se lo proponen. La iniciativa plantea el cese definitivo de la violencia para dialogar con ETA y rechaza la negociación política, nos cuenta El País, que añade que el gobierno ve con interés la iniciativa de los nacionalistas. Por su parte, el PP, que hasta ahora ni hace ni deja hacer, cree que el pacto debe partir de los dos grandes partidos.

Se sabe, entre tanto, y así nos lo cuenta ANV, que el gobierno se reunió con ETA en abril para hablar de ANV y el 27-M, y que el ejecutivo habría visto bien la fórmula ANV para tapar a Batasuna, pero que las listas debían ir "limpias". Según la referida información, el encuentro, en una ciudad europea, concluyó sin acuerdo y a él asistieron dos diplomáticos.

José Cavero.

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