Actualizado 15/06/2010 14:00

José Cavero.- González, de nuevo, con Zapatero

MADRID, 15 Jun. (OTR/PRESS) -

Recientemente, el ex presidente Felipe González salía en defensa de su compañero de partido, José Luis Rodríguez Zapatero, y elogiaba la valentía de sus decisiones. Ahora, el ex presidente del gobierno ha vuelto a salir a echarle un capote al varapaleado -como le llama La Vanguardia- gobierno de Rodríguez Zapatero, al que cree que "le ha golpeado la realidad de la crisis y se le nota". En una entrevista ofrecida a una emisora nacional, el ex presidente ha tratado de hacer pedagogía para hacer entender que nos encontramos ante un momento histórico y para destacar la importancia, según él, de "llevar adelante" una reforma. Al respecto, ha criticado duramente que, hasta ahora, ni los políticos, ni los sindicatos ni la patronal han tenido "la sensación de emergencia nacional europea y global en la que estamos, si la hubieran tenido estoy convencido de que hubieran actuado de una forma completamente diferente", ha dicho el ex presidente.

González, ha hecho un duro análisis de la situación del país y ha enfatizado el hecho de que en España andamos cortos de competitividad, una palabra maldita subrayada por el FMI y otros entes internacionales como uno de los factores clave para entender la crisis española. "Me preocupa que en el dialogo social no se hable de ganar competitividad, valor añadido, el núcleo de nuestro problema se debe a la falta de competitividad", ha lamentado. "El instrumento de las relaciones industriales, que es más importante que el de las relaciones laborales, tiene que vincular los salarios a la productividad. Tenemos que competir con más productividad, más excelencia, más valor añadido", ha opinado González.

A pesar de estas carencias, González ha hecho una llamada a la calma al considerar que "tenemos problemas, pero como toda Europa". "No tenemos malas cifras comparativas, tenemos un problema de dualidad mercado trabajo, exceso de dependencia de la construcción, y una estructura económica que, en una parte importante, depende de la temporalidad del turismo. Hemos cometido excesos, no tenia lógica construir más casas que Alemania y Francia juntos y lo hemos hecho, pero creo que tampoco hay que demonizarlos, tenemos una estupenda industria de la construcción y del turismo". Respecto a cómo está viendo la actuación del presidente del Gobierno, González ha admitido que a Zapatero "lo ha golpeado la realidad de la crisis y se le nota, físicamente", aún así asegura sentirse "tranquilo" y ha resaltado sus dotes de hombre de estado por que "lo que más le define es su determinación de afrontar los problemas sin tener en cuenta las consecuencias en votos o popularidad, y eso me tranquiliza, por que no nos estamos jugando porcentajes de voto, nos estamos jugando el futuro de la economía del país".

Preguntado sobre si las reformas para paliar la crisis económica deben plantearse forzosamente a costa del Estado de Bienestar, una de las señas de identidad del sistema económico y social europeo, González ha recordado que "Europa tiene estructuras económicas obsoletas que nos hacen perder competitividad en la economía global", pero que eso no quiere decir que por ello se deba destruir el modelo del estado de Bienestar. "Al contrario, si creemos en él, para financiarlo tenemos que tener una economía competitiva. Si queremos conservar este modo de vida, tenemos que adaptarnos a los condicionamientos de la economía del siglo XXI. No podemos mantener el Estado de Bienestar si no hay una economía productiva y competitiva", ha sentenciado el ex presidente socialista. Frente a algunos que entienden que González "tiende a inmiscuirse en tareas que no le son propias" y a pisar en los terrenos de Zapatero, muchos militantes socialistas elogian el compromiso del ex-presidente con el actual inquilino de la Moncloa y que salga en su defensa precisamente en momentos difíciles.