MADRID 5 May. (OTR/PRESS) -
Nada tienen que ver, ciertamente, la famosa tonadillera viuda del torero y el ilustre catedrático llegado a presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores tras una larga y brillante trayectoria profesional. Sólo coinciden en su condición de haberse convertido en "piedras de escándalo" del momento, o empleados como tal cosa por el principal partido de la oposición. Primero, el caso de la señora de la nación. Isabel Pantoja quedó en libertad tras pagar una fianza de 90.000 euros, y las investigaciones judiciales han destapado sospechosas compras de reses bravas y de viviendas. La tonadillera está acusada de adquirir propiedades con dinero procedente de Julián Muñoz. La cantante habría invertido cantidades superiores a las que puede justificar. El juez investiga si Pantoja ha sido testaferro de Muñoz, y desde hace meses sigue el rastro de los bienes inmuebles y del ganado vacuno adquiridos por la cantante.
Pero... el PP ve la mano del Gobierno tras la declaración judicial, mientras el fiscal Pumpido vincula el arresto a los fondos de Muñoz y el Gobierno niega toda relación de la detención con el viaje del presidente a Marbella. Reclaman que se preste atención a la tarea que viene efectuando el juez Torres, que lleva producidas 99 detenciones en los cuatrocientos días de sus pesquisas judiciales. Hay, sin embargo, una información de 'ABC' que viene a reforzar la teoría de esta nueva conspiración del Gobierno: La policía supo hace 15 días que Pantoja sería detenida, y sólo recibió la orden de proceder a su detención y arresto tras el mitin de Zapatero en Marbella. Esta crónica cuenta más cosas: que la cantante pasó la noche en una celda de la Comisaría que Zapatero visitó horas antes de la detención. Naturalmente, el PP se pregunta porqué el "Gobierno recurre a "operaciones de gran calado mediático" cuando tiene otra clase de problemas que afrontar. El PP cree que el Gobierno intenta tapar otros asuntos con la detención.
El segundo personaje "problemático" del momento, es Julio Segura. Nadie duda de la brillantez de su currículo, pero sí se expresan muchas dudas sobre su independencia del Gobierno e incluso que sea "el más indicado para un momento crítico en el cargo". Hasta el punto de que el PSOE se quedó sólo en su respaldo a la candidatura. Por lo demás, las propias declaraciones de Segura no le ayudan en esta hora crucial: recibió llamadas de la Oficina económica de la Moncloa para que apoyara la OPA de Gas Natural, apoya la continuidad del no menos controvertido Arenillas, y tiene sus ahorros invertidos o gestionados por Intermoney, que ha venido a convertirse en la representación de una nueva 'beautiful people' de los socialistas gobernantes. Insiste la oposición en dos "necesidades elementales" en el caso: el nuevo presidente del regulador del mercado debiera ser hombre de consenso, y no basta ser honrado u honesto: también es preciso parecerlo...
JOSE CAVERO