Actualizado 28/04/2010 14:01

José Cavero.- Montilla y Mas propician la renovación del TC.

MADRID 28 Abr. (OTR/PRESS) -

A las pocas horas de haberse divulgado el mensaje de la presidenta del Tribunal Constitucional en el que denunciaba una campaña de desprestigio contra el Tribunal, los dos principales dirigentes políticos catalanes, Montilla y Mas, anunciaban su propio avance para llevar al Parlament de Cataluña y a las Cortes su deseo de que el TC proceda a una renovación que saque de su actual parálisis la sentencia sobre el Estatuto catalán. Recuérdese que María Emilia Casas había dicho, en el Club Siglo XXI, en la tarde del lunes, entre algunas otras afirmaciones, que "la Constitución ha sido un éxito porque se basó en la concordia, en el consenso". "En democracia no cabe más que respetar las instituciones que son pilares básicos". "La campaña de desprestigio contra el TC es desproporcionada e intolerable". "No es aceptable la crítica interesada e irracional". "Hay crisis institucional".

Pues bien, este martes por la mañana, el presidente de la Generalitat, José Montilla, y el presidente de CiU, Artur Mas, han desencallado la resolución unitaria que votará el Parlament, y que plantea un frente común catalán en Madrid para defender el Estatut y propiciar la renovación del Tribunal Constitucional (TC). Fuentes de ambas formaciones explicaron que los contactos entre Montilla y Mas, antes de iniciarse la reunión de esta mañana del Govern, acabaron de desbloquear el acuerdo al limar los últimos flecos de la resolución, que finalmente constará de cuatro puntos: el primero reafirma la plena constitucionalidad del Estatut, el segundo insta a Congreso y Senado a proceder de forma inexcusable a la renovación del TC, el tercero incluye una de las exigencias de CiU al emplazar al TC a declararse incompetente para pronunciarse sobre el Estatut, mientras que el cuarto pide reformar la ley orgánica del Constitucional para impedir la permanencia de magistrados con mandato caducado.

Ayer mismo, estaba aún en la cuerda floja la respuesta que todos los partidos catalanes, menos el PP, se emplazaron a dar ante las dificultades del Tribunal Constitucional para dictar sentencia sobre el Estatuto. Las exigencias de Convergència i Unió, que pretendían endurecer la respuesta, impedían materializar ese pacto de los nacionalistas con los socialistas catalanes, Esquerra Republicana e Iniciativa-Esquerra Unida. A la formación de Artur Mas no le bastaba con debatir la renovación del Tribunal Constitucional en el Senado. Quiere hacerlo también en el Congreso. Además, exigía que el Parlamento catalán presente un requerimiento de incompetencia para que el Constitucional se inhiba sobre el Estatuto, algo que los demás partidos consideran irrealizable desde el punto de vista jurídico.

Aunque todos son conscientes de que los problemas que aquejan al Tribunal Constitucional sólo pueden resolverse a corto plazo si hay un pacto entre PSOE y PP para renovar los miembros cuyo mandato ha expirado, los partidos catalanes entienden que deben dar una respuesta política conjunta y dejar claro que no tolerarán ningún recorte al Estatuto. A finales de la semana pasada todos eran optimistas y varias fuentes apuntaban ya a que el acuerdo estaba hecho. La sorpresa llegó el lunes cuando, al sentarse a negociar el tripartito con CiU, los representantes de Convergència i Unió exigieron que el debate se lleve a cabo también en el Congreso, algo que el líder nacionalista, Artur Mas, consideró el viernes que no era imprescindible. Con todo, los cuatro partidos, tripartito y CiU, evitaron dar por muerta la negociación y hoy continuaron intercambiándose propuestas, para que el pleno del Parlament que comienza este miércoles pueda votar la resolución conjunta. Hoy parecen haber quedado resueltos los problemas previos...

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