José Cavero.- Sarkozy, estrella invitada

MADRID 19 Dic. (OTR/PRESS) -

Sin lugar a dudas, en los diarios y en la actualidad de este martes hay dos personajes extranjeros que predominan y vencen a cualquier otra actualidad española, como la propina de Solbes, el aborto del PSOE, o la financiación de Palestina. Son tales personajes el líder libio Gadafi y la probable novia de Sarkozy, Carla Bruni. Ambos, sin duda, tienen peculiaridades personales llamativas y hasta chocantes...

Gadafi está en fotografía en casi todas las primeras páginas de los diarios y en muchos editoriales de los diarios más sesudos. Y no necesariamente para bien. Carla Bruni, asimismo, merece atenciones amplias en las secciones "del corazón" o de sociedad... No hay otros paralelismos entre ellos, salvo su relación con "la vida pública" o la vida política nacional o internacional.

De Gadafi se señala y destaca, sobre todo, que "deja contratos millonarios". Y que Zapatero espera contratos con Libia por 11.500 millones de euros. Indican fuentes diplomáticas que Gadafi acepta un marco general de cooperación política y económica, y que se han negociado en sectores estratégicos. Pero no se evitan críticas en la mayor parte de los medios informativos: La gira del dictador libio desprestigia la causa de la democracia en Africa -dice El País. Pero tampoco se salvan los anfitriones del personaje: Dice ABC que Zapatero legitima a Gadafi con una declaración política y económica.

Se olvida, sin duda, de que Aznar fue el primer dirigente occidental que rompió el hielo tras el cerco mundial al Gadafi que derribó un avión de pasajeros norteamericano, y que por ello Gadafi quiso cenar, en primer lugar, con Aznar y su señora, el sábado en Sevilla.

En todo caso, parece evidente que Zapatero y Gadafi han sellado una alianza estratégica que abre contactos por 12.000 millones. En concreto, los contratos de defensa y aeronáutica ascenderán hasta los 2.000 millones. Cabe recordar que España es el tercer país que más hidrocarburos compra a Libia. España se suma a Francia, de este modo, para abrir a Libia las puertas del concierto internacional. Y también parece evidente que esos importantes dineros de los negocios abren cualquier puerta, hasta el punto de poderse hablar de "una visita mil millonaria", y que Zapatero abre con Gadafi una cuantiosa expectativa inversora. Por lo demás, también es novedad de relieve que España y Libia hayan mostrado plena sintonía en la lucha antiterrorista y contra la inmigración ilegal.

Es seguro que Gadafi, como los dirigentes políticos españoles, han comparado esta visita y sus frutos con la que "el hombre de la jaima" realizó frecuentemente a París y a Sarkozy. Incluso hay una viñeta humorística, de Ventura y Coromina, en La Vanguardia, que hace referencia a este viaje: Zapatero pregunta a Gadafi: ¿Está todo a su gusto, coronel Gadafi? ¿Desea alguna cosa más?. Y responde Gadafi: Sí, un arsenal de juguetes bélicos como los que me ofreció Sarkozy. Es un gran revolucionario, añade el libio... Por lo demás, los cronistas reflejan algunos datos curiosos de la peculiar visita de Estado: Las cinco toneladas de leña reclamadas desde El Pardo para calentar su jaima ; su séquito de 300 personas, una guardia femenina de mujeres vírgenes ...

José Cavero.