MADRID 27 Nov. (OTR/PRESS) -
Definir correctamente un problema es el primer paso para intentar resolverlo con acierto. Tengo para mí que es lo que ha hecho Montserrat Comas de Argemir, vocal del Consejo General del Poder Judicial, al referirse a la lacra de la violencia doméstica diciendo que "no es una batalla de mujeres contra hombres, es una batalla de hombre y mujeres contra los maltratadores". Creo que sus palabras aciertan con el núcleo del problema despojando la violencia de sexo de diagnósticos apresurados. 69 mujeres han sido asesinadas este año en España; todos los homicidas eran varones, pero en nuestro país la mayoría de la población (hombres y mujeres) está en contra de la violencia machista.
Los maltratadores pertenecen a todas las clases sociales y desempeñan todo tipo de profesiones. Qué en los últimos once meses hayan sido asesinadas 69 mujeres -una cada cinco días-,supone una tragedia insoportable. Una tragedia que nos convoca a todos.
A los gobernantes -que deberían endurecer el Código Penal y presupuestar más recursos para prevenir el mal atendiendo a las amenazadas- ; de los jueces para que sean implacables aplicando la ley, y, también, al resto de los ciudadanos, para estar vigilantes sobre posibles casos de malos tratos. Como dice Montserrat Comas, es un lucha de todos-mujeres y hombres- contra los maltratadores. 69 mujeres asesinadas en un año,69 mártires, es, como digo, una tragedia insoportable.