MADRID 13 Jun. (OTR/PRESS) -
Qué ocurrencia la de Mariano Rajoy al meterse en la boca del lobo de la emisora episcopal al día siguiente se su importante reunión con Zapatero. Como ha recordado otra emisora, se marcha a dar sus explicaciones a donde le llaman Maricomplejines, que ya es llamar al presidente de un partido, jefe de la oposición y, para colmo, correligionario de quienes de tal manera le faltan al respeto. Pues así, creo yo, no tuvo más remedio que hacer una presentación light de sus compromisos del día anterior con el presidente del Gobierno, pues, en caso contrario, a lo mejor se lo comen allí mismo ante los micrófonos. Rajoy tiene que liberarse también de esas cosas, además de liberarse de las insoportables presiones de los ultras de su propio partido, que los hay, y muchos. Del propio Zaplana, que no ha tenido otra ocurrencia que decir que el actual Pacto Antiterrorista está muy bien como está y que el que quiera adherirse que lo haga. Hay que estar en otro planeta para pensar que el PNV o CiU podrían adherirse al preámbulo de tal pacto.
Yo no doy por oído el mensaje forzado de Rajoy en la COPE, según el cual en la campaña electoral de las generales hablará del Estatuto catalán, de la Ley de la Memoria Histórica y, sobre todo, de la política antiterrorista. Esto último iría en flagrante contradicción con lo acordado el lunes con Zapatero y con el artículo primero de su adorado Pacto Antiterrorista, que prohíbe terminantemente la utilización del terrorismo en la lucha política y electoral. Así que vamos a ver en qué quedamos. La clave es un nuevo pacto en el que estén todos, empezando por el PNV, y con el que todos coincidan. Pero la alusión al Estatuto catalán es también muy desgraciada, en plena operación de la dirección del PP para recuperar la amistad con los nacionalistas moderados, de cara a las generales y posibles pactos posteriores. ¿Cómo iba a esperar el apoyo de CiU tras descalificar de nuevo el Estatuto catalán, que es la firme base de la política de CiU y de la institucionalidad catalana? A ver si somos un poquito más prudentes, hábiles y coherentes.
Pedro Calvo Hernando.